En la ciudad de Baguz, Siria, se ha librado la última batalla contra Dáesh. Las fuerzas sirias han anunciado la derrota territorial del grupo yihadista en Siria, pero los expertos advierten.
"Aunque Dáesh pierda el últimos de los enclaves, no va a dejar existir", asegura Fernando Reinares, experto en terrorismo y radicalización del Real Instituto Elcano.
Sin territorio, pero todavía presente. El grupo terrorista seguirá activo y pasará a ser, según los expertos, una estructura clandestina con activistas en lugares de todo el mundo.
"Será mucho más difuso, desorganizado, invisible y dificil de combatir. Ese va a ser probablemente el siguiente paso de Dáesh", ha explicado Alberto Priego, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Pontificia de Comillas.
"Otros combatientes de Daesh que han ido saliendo del escenario de ese pseudocalifato y que actualmente están llevando a cabo acciones violentas están volviendo a su perfil insurgente en el que son auténticos maestros", ha apuntado Jesús Núñez, codirector de IECAH.
El declive de Dáesh también puede afectar a una de sus principales armas: la difusión de sus mensajes a través de las redes sociales. "Que persista el mensaje no quiere decir que persista la movilización porque existe el mensaje pero no existe el califato. Existe el mensaje pero no existe una organización vista como poderosa, vista como exitosa", ha añadido Reinares.
Pero el fracaso de Dáesh no conlleva la desaparición del terrorismo yihadista. De hecho, mientras occidente miraba en los últimos años a Dáesh, Al Qaeda, dicen los expertos, ha aprovechado para reorganizarse.
"Está mejor posicionada en estos momentos para, a corto y medio plazo, volver a ser la principal amenaza yihadista de nuestras sociedades", ha destacado Reinares.
Los expertos advierten: habrá que prestar atención a los combatientes que retornan y a aquellos que se han radicalizado en occidente.