Macron designa al centrista François Bayrou como primer ministro de Francia tras la dimisión forzada de Michel Barnier

Sin sorpresas. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha nombrado este viernes a François Bayrou como el nuevo primer ministro como sustituto del conservador Michel Barnier, que duró tres meses en el Gobierno, según ha informado la Presidencia. El dirigente, que se esperaba que tomara una decisión este jueves, ha tenido que aplazarlo a este viernes, un síntoma de las dificultades que ha encontrado para designar a un sustituto. De hecho, el político veterano es el cuarto jefe de Gobierno desde la reelección de Macron en lo que llevamos de 2024.

Con ello, Macron excedió el plazo de 48 horas que él mismo había anunciado el pasado martes a los dirigentes de varios partidos políticos para designar al nuevo jefe del Gobierno. Finalmente, ha asignado al histórico líder centrista y firme aliado de Macron, de 73 años, tras reunirse con él, por segunda vez, en el Palacio del Elíseo por la mañana. Una reunión larga y que Le Monde ha descrito como "tensa" por las discrepancias sobre quién será el número dos de su Ejecutivo.

El presidente francés busca con este nombramiento poner fin a la crisis política abierta el pasado día 4 cuando el Ejecutivo del conservador Michel Barnier fue derribado por una moción de censura apoyada por los cuatro partidos del bloque de la izquierda y por la extrema derecha de Marine Le.

En una Asamblea Nacional en la que ningún bloque político tiene una mayoría clara, el reto de Macron era nombrar un primer ministro cuyo Gobierno no caiga en otra moción de censura rápida, después de que el de Barnier solo sobrevivió tres meses. Apenas minutos después de conocerse esta decisión, La Francia Insumisa ya ha anunciado que presentará una moción de censura contra Bayrou. La política de la formación Mathilde Panot ha señalado que "se ofrecerán dos opciones a los diputados: el apoyo al rescate de Macron o la censura".

La formación de Jean-Luc Mélenchon dejó muy claro que no apoyará a ningún candidato que proponga Macron. Ahora, falta por conocer las reacciones del resto de formaciones. Cabe recordar que no hay límite de tiempo antes de poder presentar una moción de censura después de presentarse la primera hace menos de dos semanas.

Tras un baile de nombres

Mientras, el país afronta esta convulsión política, con la urgencia de aprobar un presupuesto para el año próximo que detenga el crecimiento del déficit público y pueda cumplir con los compromisos adquiridos con Bruselas. Hasta llegar al nombre de François Bayrou, el baile de nombres fue constante, ante lo que se consideraba una decisión inminente. Sobre la mesa, además de Bayrou, estaba el exsocialista y ex primer ministro Bernard Cazeneuve y Roland Lescure, vicepresidente de la Asamblea, pero ninguno ha convencido.

El presidente reunió el pasado martes a todos los partidos con representación parlamentaria menos la extrema derecha de Marine Le Pen y la izquierdista La Francia Insumisa de Jean-Luc Mélenchon. Desembarazado de los extremos, Macron esperaba encontrar un terreno para reunir a sus diputados de centro, a socialistas, ecologistas y comunistas, de la izquierda, y a la derecha moderada.

En el fondo, un pacto entre ellos para renunciar a presentar una moción de censura, a cambio de que el nuevo Gobierno se comprometiera a consensuar los presupuestos. No obstante, el débil compromiso fue perdiendo fuerza a medida que pasaban las horas y que los responsables de los diferentes partidos fueron imponiendo vetos a los distintos candidatos. Por eso, falta conocer si Bayrou contó con el consenso de una buena parte de los partidos que conforman la Asamblea Nacional francesa.

Bayrou resalta que la "reconciliación es necesaria"

El recién nombrado primer ministro francés, François Bayrou, ha asegurado que "la reconciliación es necesaria" en referencia a la situación de bloqueo político que vive el país, abriendo así la puerta a colaborar con todos los partidos. "Todo el mundo sabe la situación difícil en la que estamos. Pero hay un camino que tenemos que encontrar, el de la unidad en lugar de la división", señaló el jefe de Gobierno ante la prensa.

Ese nombramiento "llega en el buen momento, porque coincide con el aniversario del nacimiento de Enrique IV", dijo en referencia al rey que con la frase "París bien vale una misa" puso fin a las guerras de religión en la Francia del siglo XVI, y del que él es uno de los principales estudiosos. Bayrou se refirió a ese monarca para asegurar que "la reconciliación es necesaria".