La Policía francesa cargó contra los manifestantes convocados por los "chalecos amarillos" en los Campos Elíseos de París con motivo de la fiesta nacional de Francia.
Los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes estallaron una vez finalizado el desfile militar en la célebre avenida parisina y una vez que encapuchados e integrantes de los "chalecos amarillos" intentaron montar barricadas con las vallas metálicas que había sido utilizadas para bloquear el paso del público durante la parada militar, y quemaron papeleras.
La policía respondió con gases lacrimógenos y cañones de agua y los bomberos intervinieron para apagar algunas de las papeleras incendiadas sin que, por el momento, se conozcan heridos ni detenciones. Antes, y durante los actos de celebración, 152 personas fueron detenidas este domingo en la capital.
La mayoría fue arrestada por participar en una manifestación no autorizada. También hubo detenciones por violencia contra la autoridad, destrozo de bienes públicos o posesión de armas, precisaron fuentes policiales.
La situación también había sido tensa al inicio de la conmemoración, cuando algunas personas recibieron con pitidos y abucheos al presidente de Francia, Emmanuel Macron. Según la cadena 'CNews', dos de los detenidos son Jérôme Rodrigues y Éric Drouet, figuras destacadas del movimiento contestatario de los "chalecos amarillos", iniciado el pasado noviembre.
"Quienes han intentado impedir este desfile deberían tener un poco de vergüenza. Hoy es un día en el que la nación se une y creo que la nación debe ser respetada", señaló a la prensa el ministro francés del Interior, Christophe Castaner.
La líder del partido ultraderechista francés Agrupación Nacional, Marine Le Pen, criticó en Twitter que los llamados "black blocs", grupos de encapuchados que siembran el caos en las manifestaciones, hayan sido capaces de actuar en esta jornada festiva, y calificó de incompetente a Castaner.