Cerca de dos centenares de ex líderes mundiales y organizaciones internacionales han solicitado a los jefes de Estado y de Gobierno de los países del G20 que adopten medidas específicas y urgentes para combatir la crisis sanitaria y económica derivada delcoronavirus, para lo que piden la movilización de 8.000 millones de dólares.
Los firmantes, entre los que se encuentran Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero, Javier Solana o Ana Palacio, ponen de manifiesto que la crisis económica no se resolverá hasta que se aborde de manera efectiva la emergencia sanitaria, por lo que solicitan una acción internacional coordinada.
Señalan que todos los sistemas sanitarios "incluso los más sofisticados y mejor financiados" están cediendo a las presiones del virus
En la misiva, destacan que todos los sistemas sanitarios "incluso los más sofisticados y mejor financiados" están cediendo a las presiones del virus y señalan que "si no hacemos nada a medida que la enfermedad se propaga en las ciudades más pobres de África, Asia y América Latina", en zonas donde mantener la higiene y las medidas de distanciamiento social es más difícil, la enfermedad persistirá y el mundo tendrá que enfrentarse a una nueva oleada de la pandemia provocando la prolongación de la crisis.
Medidas para la crisis sanitaria
Así, piden a los países más industrializados del mundo que movilicen 8.000 millones de dólares, de los que 1.000 millones se destinarían a la OMS, 3.000 millones para la investigación de vacunas y 2.200 millones para desarrollar y ampliar el acceso a tratamientos.
En la misma línea, solicitan que se invierta 35.000 millones de dólares para respaldar a los países cuyo sistema de salud es más precario y que cuenten con poblaciones especialmente vulnerables.
Y es que, según la OMS, casi el 30% de los países no tienen planes nacionales para afrontar una crisis como la del coronavirus y solo la mitad tiene un programa nacional de prevención y control de infecciones.Medidas para la crisis económica
En materia económica, los firmantes destacan que el objetivo debe ser "evitar que una crisis de liquidez se convierta en una crisis de solvencia y que una recesión global se convierta en una depresión global" y con este fin hacen un llamamiento a coordinar medidas fiscales, monetarias, así como iniciativas de los bancos centrales y antiproteccionistas.
De este modo, instan a recapitalizar de nuevo al Banco Mundial así como a los bancos regionales de desarrollo. Igualmente piden destinar 2.000 millones de dólares para ofrecer ayuda humanitaria a los refugiados y desplazados "cuya situación es probable sea desesperada", señalan.
Al tiempo que piden la condonación de la deuda de los países más pobres, lo que incluye 44.000 millones de dólares adeudados por África y piden que encarguen al FMI y al Banco Mundial que evalúen aún más la sostenibilidad de la deuda de los países afectados.
También consideran la necesidad de poner en marcha 150.000 millones para los sistemas sanitarios y de seguridad social de los países africanos y en vías de desarrollo. Las personañidades que firman la carta piden que se acuerden todas estas asignaciones de inmediato y se coordinen por un Grupo de trabajo ejecutivo del G20 y que se confirmen en las próximas reuniones del FMI y el Banco Mundial.
"Las Naciones Unidas, los gobiernos de las naciones del G20 y los socios interesados deben trabajar juntos para coordinar más acciones", concluye la carta que destaca que la solución a largo plazo pasa por un replanteamiento radical de la salud pública mundial.