La mayoría de los heridos se concentran en el epicentro del terremoto, ocurrido en la localidad de Sivrice, provincia de Elazig, según han constatado los servicios de rescate a la agencia oficial de noticias turca Anatolia. Elazig ya resultó sacudida en 2010 por un seísmo de magnitud 6 que se saldó con la muerte de 51 personas.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado que se están tomando todas las precauciones "necesarias" para superar el terremoto para que se produzcan las menores pérdidas posibles y para garantizar la seguridad de los ciudadanos, ha trasladado a través de su cuenta de Twitter.
Erdogan ha mostrado su apoyo a los que han fallecido a causa del terremoto y ha deseado a los heridos una pronta recuperación. Por su parte, el vicepresidente del país, Fuat Oktay, ha indicado que el terremoto ha causado ya 35 muertos y más de 1.600 heridos, según el último balance oficial.
Además, ha anunciado que las "labores de búsqueda y rescate han sido enviadas a la región y que se mantendrá informada a la población a medida que se desarrollen los acontecimientos". Soylu ha aseverado que las zonas rurales podrían ser las más afectadas por el temblor, pero no ha ofrecido más detalles al respecto, según ha informado la agencia de noticias Anadolu.
Informaciones preliminares de la Presidencia para Gestión de Desastres y Emergencias (AFAD) situaban en 6,8 la magnitud del seísmo, pero poco después el Instituto de Investigación de Terremotos de Estambul ha rebajado la misma a 6,5.
El ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, ha anunciado que el Ejército se encuentra a la espera y preparado en caso de que sea necesaria su intervención, mientras que el gobernador de la provincia de Gaziantep, en el sureste del país, ha sostenido que no hay heridos ni pérdidas materiales en la región.
El gobernador de Tunceli, Tuncay Sonel, ha aseverado que el seísmo se ha sentido en la provincia, pero que este no ha provocado daños.