El Partido Laborista ha obtenido este jueves una victoria aplastante en las elecciones del Reino Unidode 2024. Su líder, Keir Starmer, hombre de leyes y fiscal reconvertido a político, ha llevado a los laboristas a este resultado, hundiendo a los conservadores. ¿Pero qué ha provocado este resultado? ¿Qué promete Starmer en su programa electoral?
El laborista se enfrenta a muchos dolores de cabeza tras 14 años de caos conservador, que han llevado al país a una situación crítica en algunos sectores. Starmer dejó claro cuáles son sus primeros pasos si llega al gobierno: "estabilidad económica, reducir los tiempos y las listas de espera del servicio nacional de salud, y un nuevo mando de seguridad fronteriza".
Así lo anunció al presentar su programa electoral en un acto en Manchester (noroeste de Inglaterra) el pasado 13 de junio. Estas son las principales propuesta del Partido Laborista de cara a esta nueva legislatura:
¿Qué propone Starmer para la economía?
El líder del Partido Laborista británico prometió dar prioridad a hacer crecer la estancada economía del Reino Unido respetando "un estricto control del gasto", para mantener bajos la inflación y los tipos de interés.
Starmer aseguró que todas sus iniciativas de gobierno "estarán debidamente financiadas" por los ingresos del Estado -sin generar deuda adicional- en cumplimiento de una rigurosa disciplina fiscal.
Como parte de su plan para fomentar la prosperidad, el programa laborista propone restaurar la estabilidad económica, con una estrategia industrial para que las empresas puedan planear sus inversiones y un límite del 25 % al impuesto de sociedades.
El laborismo buscará promover la inversión a través de un nuevo Fondo Nacional de Riqueza que canalice capital "a las industrias del futuro" y de la entidad Great British Energy, que velará por la transición a la energía limpia,
¿Qué hará el laborismo con los impuestos?
El dirigente laborista aseguró que "no subirá los impuestos a la gente trabajadora: el impuesto sobre la renta, el IVA y las contribuciones a la seguridad social", si bien no aludió a otros como el del patrimonio.
Starmer sostuvo que el crecimiento económico "es el medio y el fin de cara a una renovación nacional" tras 14 años de mandato conservador. Se distanció de posiciones pasadas de su formación centradas en gravar a las rentas altas para invertir en los servicios públicos y dijo que el laborismo bajo su liderazgo "ha cambiado".
Starmer cree que haciendo crecer la economía de esta manera el Estado podrá recaudar en torno a 70.000 millones de libras (unos 82.800 millones de euros) adicionales para invertir en la mejora de los servicios a los ciudadanos.
¿Qué pasará con el plan de Sunak sobre migración?
En materia de migración, el objetivo de Starmer es demostrar que cuenta con una estrategia alternativa a la del primer ministro saliente, Rishi Sunak. El laborista prometió como alternativa crear una unidad de seguridad de fronteras para combatir a los grupos de crimen organizado que trafican con inmigrantes.
El antiguo fiscal general del Estado reiteró su intención de eliminar el polémico plan del actual Gobierno conservador de enviar a los potenciales refugiados a Ruanda, pues considera que, además de ineficaz, no es rentable dado que solo podrá aplicarse a un pequeño porcentaje de ellos.
Su idea es crear una nueva unidad que combine las principales agencias del orden y fronterizas del Reino Unido y cuente con amplias competencias para atajar el tráfico ilegal en origen y a lo largo de toda la cadena. Según Starmer, será "una fuerza de élite, no una Cenicienta", y se tratará además de mejorar la cooperación con las agencias internacionales, en particular la Europol.
El dirigente laborista también propuso endurecer las medidas judiciales preventivas y las penas de prisión contra los miembros de esas bandas organizadas, así como hacer más efectivo el sistema de procesamiento de solicitantes de asilo en el Reino Unido.
El plan de Ruanda del Gobierno "es una artimaña, no una solución", criticó el líder del primer partido de la oposición. "Una iniciativa que permitirá que sólo unos cientos de personas al año sean expulsadas a Ruanda, menos del 1% de las que cruzan el mar en botes anualmente, por (un coste de) 600 millones de libras esterlinas (unos 700 millones de euros), no es ni un elemento disuasorio eficaz ni un buen uso del dinero", adujo.
El control de la migración ilegal es uno de los caballos de batalla de cara a la nueva legislatura, después de que el Ejecutivo de Rishi Sunak convirtiera en prioridad reducir las llegadas de inmigrantes por el Canal de la Mancha.
Esto promete sobre el principal problema del Reino Unido: la sanidad
Su partido ha centrado su programa en combatir el empeoramiento de los servicios públicos, entre ellos la que peor está: la sanidad. Y es que la satisfacción ciudadana con su sistema de salud ha ido cayendo en los últimos años hasta niveles irrisorios por los graves desafíos que encuentra: huelgas de médicos residentes que exigen un aumento salarial del 35 %, escasez de profesionales cualificados tras el Brexit o inmensos retrasos en las listas de espera.
Millones de personas han de esperar meses para someterse a intervenciones rutinarias -como un reemplazo de rodilla o cataratas-. Los últimos datos oficiales muestran listas que alcanzaban los 7,5 millones a finales del pasado marzo.
Por eso, Starmer promete reducir los tiempos de espera en hospitales y centros de salud. El Partido Laborista ambiciona atajar ese problema en cinco años, creando más citas durante las tardes y fines de semana.
El laborismo asegura que creará 7.500 nuevas plazas en las facultades de Medicina y 10.000 nuevos puestos de enfermeras y matronas al año.
El perfil de Starmer, un fiscal convertido a político
Su programa lo representa, porque Keir Starmer es un hombre de leyes, un fiscal reconvertido a político que ha dado una victoria arrolladora a los laboristas en las elecciones generales. Valga sobrio como aburrido, hermético, soso y constreñido. Pero también como moderado, pragmático, racional y sensato.
Starmer no se ha movido ideológicamente ni un centímetro: disciplina fiscal, rigor en las cuentas, promesas realizables y seriedad en la gestión conforman el núcleo de su mensaje.
Pese a su obsesión por la privacidad, el candidato ha relatado una y otra vez los pormenores de su infancia en una familia de clase trabajadora que sufría para llegar a fin de mes.
Nació en 1962 en Surrey, al sur de Londres, un área tradicionalmente burguesa y conservadora, donde siempre se sintió, según su biografía, un poco fuera de sitio. La figura de su padre, un artesano con fuertes convicciones de izquierda, tiene una importancia capital a la hora de explicar al personaje.