Al menos 15 personas han muerto y otras 13 están desaparecidas como consecuencia del derrumbe de una presa fluvial de la región siberiana de Krasnoyarsk, según informaron los servicios de Emergencia de Rusia.
Las autoridades locales informaron de que "previsiblemente" las cifras de muertos se incrementarán tras la catástrofe ocurrida en una cuenca aurífera del río Seiba.
Fuentes oficiales confirmaron a las agencias locales que entre los muertos, heridos y desaparecidos figuran los operarios que residían en los barracones provisionales que fueron arrasados por la tromba de agua provocada por las intensas lluvias de los últimos días.
Casi 300 personas participan en las operaciones de búsqueda y rescate.