Cuando pensábamos que nos habíamos librado del temporal Ciara, una semana después llega Dennis.
Es la segunda borrasca atlántica más potente por sus características extremas y ya hay que lamentar la muerte de al menos tres personas.
En las Islas Británicas y en la costa atlántica, desde Noruega hasta el norte de España, ha dejado lluvias intensas y vientos huracanados. Pero también en Islandia, allí ha habido rachas de viento de 256 kilómetros por hora, lo que equivale a la velocidad del viento en un huracán de categoría 5.
Un avión ha tenido que luchar firmemente contra el viento en el aeropuerto de Heathrow, en Londres. El piloto ha tenido que hacer grandes peripecias para aterrizar entre fuertes tambaleos. Milagrosamente, lo ha conseguido sin ningún problema.
No ha sido el único que lo ha pasado mal. También los pasajeros de un barco se han visto sacudidos. Los efectos de Dennis se han notado en el mar por las olas enormes que ha provocado.
En España también se han visto los efectos de Dennis con olas de siete metros y rachas de viento que han llegado en el norte a los 167 kilómetros por hora
Son las consecuencias de una borrasca que seguirá hasta el próximo martes.