Desde el 18 de abril hasta la fecha, las protestas contra el Gobierno del presidente Daniel Ortega han dejado 448 muertos, 2.830 heridos, de ellos 72 con lesiones permanentes, 595 desaparecidos, cientos de detenidos y decenas de procesados, según un informe divulgado por la no gubernamental Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).
Entre los fallecidos, la organización reportó una brasileña, un estadounidense y un guatemalteco. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) informó de la muerte de al menos 295 personas en los primeros 99 días del estallido social.
La CIDH ha responsabilizado al Gobierno de Nicaragua por "asesinatos, ejecuciones extrajudiciales, malos tratos, posibles actos de tortura y detenciones arbitrarias cometidos en contra de la población mayoritariamente joven del país", con el apoyo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), pero el Gobierno nicaragüense lo niega.
La "grave crisis" política que vive Nicaragua desde abril pasado cobrará otra víctima, la economía, que solo este año se calcula retrocederá al menos 3% en su PIB, advirtió el gerente general de la Bolsa de Valores de este país, Gerardo Argüello.
El Consejo Superior de la Empresa Privada de Nicaragua (Cosep) denunció ser víctima de acoso por parte del Gobierno a través de la retención de bienes, repuestos y maquinaria, lo que fue rechazado por la Dirección General de Servicios Aduaneros (DGA).
Según la denuncia del Cosep, "desde hace más de un mes se encuentran retenidas en aduana materias primas, insumos, repuestos, partes y accesorios para maquinaria y productos, destinados al uso de máquinas agropecuarias, comerciales e industriales", que de no solucionarse "se pone en riesgo la seguridad alimentaria de la población nicaragüense".
Durante la jornada, los denominados "Autoconvocados", opositores al Gobierno, celebraron manifestaciones en diferentes ciudades en el marco de los 100 días de protestas, sin incidentes.
Un grupo de estudiantes de medicina nicaragüenses también rindieron homenaje a Rayneia Gabrielle Lima, su compañera de origen brasileño asesinada la noche del pasado lunes en el sur de Managua, víctima de los disparos de "un grupo de paramilitares", según informó el rector de la Universidad Americana (UAM), Ernesto Medina.
También la Policía confirmó que mantiene detenido al alcalde opositor del municipio de Mulukukú, Apolonio Fargas, y lo señaló de pertenecer a un grupo "terrorista" que atacó una delegación policial y donde resultaron muerto tres oficiales y un civil.
En tanto, un grupo de encapuchados armados intimidó a los trabajadores de la empresa ND Medios, uno de los grupos mediáticos más importantes de Nicaragua. La vicepresidenta Rosario Murillo instó a los nicaragüenses a no admitir dentro de su ser sentimientos de odio y rencor, ni albergar deseos de venganza.
Nicaragua atraviesa la crisis sociopolítica más sangrienta desde la década de los años de 1980, también con Daniel Ortega siendo presidente. Las protestas contra Ortega se iniciaron el 18 de abril, por unas fallidas reformas a la seguridad social y se convirtieron en un reclamo que pide la renuncia del mandatario, después de once años en el poder, con acusaciones de abuso y corrupción en su contra.