El nuevo brote de ébola declarado en la República Democrática del Congo (RDC) afecta a dos provincias del noreste, Kivu del Norte e Ituri, y hasta el momento hay 13 casos confirmados y tres muertes positivas, según el Ministerio de Sanidad congoleño.
En total, el Ministerio contabiliza 43 casos (13 confirmados y 30 probables) e investiga otros 33, mientras que se han producido 33 muertes con signos de ébola, aunque sólo 3 se han confirmado positivas por la enfermedad vírica hasta el momento.
El área más afectada es Mabalako, en Kivu del Norte, pero ya hay tres casos confirmados en la ciudad de Beni, uno de los principales núcleos de la provincia, según la última información del Ministerio de Sanidad, publicada a última hora de ayer y con datos de hasta el tres de agosto. En Ituri, provincia al norte de Kivu del Norte y que colinda con Uganda y Sudán del Sur, no hay ningún caso confirmado hasta ahora pero si probables y en investigación.
Como informó la Organización Mundial de la Salud (OMS), el caso que alertó a las autoridades sanitarias fue la muerte de una señora de 65 años en la localidad de Mangina, enterrada sin las medidas de seguridad necesarias y que infectó a varios miembros de su familia, 7 de los cuales han muerto.
Al saltar las alertas, las autoridades congoleñas han encontrado casos anteriores a este y hasta el momento hay registrados 879 posibles contactos con la enfermedad. Se han instalado laboratorios móviles en Beni y otras localidades y se espera que los primeros centros de tratamiento de ébola se abran próximamente en Mangina, Beni y Goma (capital de Kivu del Norte).
La enfermedad se transmite por contacto directo con la sangre y fluidos corporales de personas o animales infectados, causa hemorragias graves y alcanza una tasa de mortalidad del 90 %.