La superficie de la Tierra alberga un 80% de probabilidades de que la temperatura media anual alcance temporalmente y por primera vez los 1,5 grados de calentamiento en los próximos cinco años con respecto a los niveles preindustriales. Así se recoge en el informe 'Boletín sobre el clima mundial anual a decenal', elaborado por la Oficina Meteorológica del Reino Unido (Met Office), que es el centro principal de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) para ese tipo de predicciones.
Se trata de una publicación que se actualiza cada año a partir de conocimientos de climatólogos de renombre y de los mejores modelos informáticos de centros climáticos en todo el mundo, bajo la coordinación de la OMM, agencia de la ONU especializada en el tiempo, el clima y el agua. El informe presenta un resumen de las predicciones de temperatura para el lustro entre 2024 y 2028.
Así, hay un 80% de probabilidades de que la temperatura media mundial anual en superficie supere transitoriamente en más de 1,5 grados los niveles preindustriales durante al menos uno de los próximos cinco años, con lo que se superaría el límite de calentamiento global recogido en el Acuerdo de París.
Esa probabilidad de que la Tierra llegue por primera vez a los 1,5 grados de calentamiento climático en el lustro siguiente ha aumentado constantemente, ya que en 2015 era casi nula, de un 20% para el lustro entre 2017 y 2021, un 50% entre 2022 y 2026, un 66% entre 2023 y 2027, y un 80% entre 2024 y 2028.
Además, el informe señala que hay un 47% de probabilidades de que la temperatura media mundial en el quinquenio 2024-2028 supere los niveles preindustriales en 1,5 grados, frente a un 32% del informe del año pasado para el periodo entre 2023 y 2027.
"Estamos jugando a la ruleta rusa con nuestro planeta"
El informe indica que la temperatura media cerca de la superficie del conjunto del planeta cada año comprendido entre 2024 y 2028 podría estar entre 1,1 y 1,9 grados por encima del periodo de referencia de 1850 a 1900. Además, hay un 86% de probabilidades de que al menos uno de estos cinco años bata el récord anual de temperatura, por encima del de 2023, que es actualmente el más cálido jamás registrado.
Ello constituye una advertencia inequívoca de que la Tierra se acerca cada vez más a los objetivos establecidos en el Acuerdo de París sobre el cambio climático, que se refieren a los aumentos de temperatura a largo plazo durante décadas, no de uno a cinco años.
"Estamos jugando a la ruleta rusa con nuestro planeta", señaló el secretario general de la ONU, António Guterres, a la luz de ese informe y antes de la próxima cumbre del G7, que se celebrará en Italia del 13 al 15 de junio. Guterres añadió: "Tenemos que encontrar una salida de esta autopista que nos lleva al infierno climático. La buena noticia es que tenemos el control del volante. La lucha para limitar el aumento de la temperatura a 1,5 grados se ganará o se perderá en la década de 2020, bajo la mirada de los líderes actuales".
Guterres también se basó en los datos del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, financiado por la UE y operado por el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio, de los cuales se desprende que cada uno de los últimos 12 meses registró un nuevo máximo histórico de temperatura mundial para esa época del año. Teniendo en cuenta estos 12 récords mensuales, la temperatura media mundial de los últimos 12 meses (junio de 2023 a mayo de 2024) también es la más alta jamás registrada: 1,63 grados por encima del valor promedio de la era preindustrial (1850-1900), según el conjunto de datos ERA5 del Servicio de Cambio Climático de Copernicus.
"Estas estadísticas revelan la cruda realidad: estamos muy lejos de cumplir los objetivos del Acuerdo de París", indicó Ko Barrett, secretaria general adjunta de la OMM. Barrett recalcó: "Es imperativo que intensifiquemos la labor para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero o pagaremos un precio cada vez más alto en billones de dólares en costes económicos, millones de vidas afectadas por un clima más extremo y grandes daños al medio ambiente y la biodiversidad". Precisó que el planeta ya ha superado “temporalmente” esa barrera de los 1,5 grados, pero concretó: “Los incumplimientos transitorios no significan que se haya incumplido definitivamente el objetivo de 1,5 grados, ya que este límite se refiere al calentamiento a largo plazo durante décadas".
¿Qué dice el Acuerdo de París?
En virtud del Acuerdo de París, los países deben mantener el aumento de la temperatura media mundial de la superficie a largo plazo muy por debajo de 2 ºC con respecto a los niveles preindustriales y proseguir los esfuerzos para limitar ese aumento a 1,5 °C a finales de este siglo. La comunidad científica ha advertido en repetidas ocasiones de que un calentamiento superior a 1,5 °C puede desencadenar impactos del cambio climático y fenómenos meteorológicos extremos mucho más graves, y que cada fracción de grado de calentamiento es importante.
Incluso con los niveles actuales de calentamiento global, ya se están produciendo impactos climáticos devastadores, como olas de calor más extremas, episodios de precipitaciones extremas y sequías; la reducción de las capas de hielo, el hielo marino y los glaciares, la aceleración del aumento del nivel del mar y el calentamiento de los océanos.
"Vivimos tiempos sin precedentes, pero también tenemos una capacidad sin precedentes para monitorear el clima y esto puede ayudar a orientar nuestras acciones. En retrospectiva, esta serie de meses más cálidos se recordarán como fríos, pero, si en un futuro muy próximo conseguimos estabilizar las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera, podríamos volver a estas temperaturas 'frías' a finales de siglo", según Carlo Buontempo, director del Servicio de Cambio Climático de Copernicus.
Según el informe de la OMM sobre el estado del clima mundial en 2023, la temperatura media mundial cerca de la superficie se situó el año pasado 1,45 grados por encima del valor de referencia de la era preindustrial. Fue, con diferencia, el año más cálido jamás registrado, como consecuencia del calentamiento del clima a largo plazo combinado con otros factores, sobre todo el episodio del fenómeno natural de El Niño.