Lorena García, reportera del diario Mexicano, de Tijuana, se acercó a López Obrador y le preguntó si le interesaba que su partido, el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), obtenga el triunfo en la elección de gobernador de Baja California del año próximo.
López Obrador se detuvo, sonrió y para sorpresa de todos, sin responder a la pregunta, procedió a besar a la periodista en la mejilla para seguir su camino a su vehículo.
El beso a la periodista es el segundo incidente que tiene el presidente electo con reporteras que siguen sus actividades después de que hace unos días les dijo "corazoncitos" a varias de ellas.
La reportera del Mexicano aseguró a la cadena Radio Fórmula que el beso que le dio el presidente electo le pareció una falta de respeto y se dijo molesta porque ella quería respuestas, aunque otras mujeres esperasen un saludo cariñoso de López Obrador.
"Se me hace una falta de respeto, hay una molestia, pero tampoco quiero una venganza. Yo soy una profesional y en 19 años de carrera jamás me había pasado esto; si las mujeres querían beso, es cosa de ellas", declaró la reportera.
El responsable de la estrategia de comunicación de López Obrador, Jesús Ramírez Cuevas, expresó al portal SDPnoticias su respeto a la reportera y a su derecho a expresar su punto de vista. "Si se sintió ofendida, hay que respetarlo", expuso.
El futuro portavoz presidencial llamó a las periodistas a expresar su disconformidad directamente a López Obrador y reiteró que en el próximo gobierno no habrá censura porque "queremos una prensa libre y transparente".
La periodista Verónica Calderón, del estado de Michoacán, comentó en su cuenta oficial de Twitter sobre el beso de López Obrador que "lo más grave es que no responde preguntas, descalifica a la prensa".