El primer ministro eslovaco, Robert Fico, ha logrado recuperar la consciencia y el habla aunque su estado de salud continúa siendo muy delicado, después del intento de asesinato que sufrió este miércoles, según ha informado el presidente electo de Eslovaquia, Peter Pellegrini. Pellegrini ha asegurado haber "podido hablar con él, pero solo unos minutos porque está muy cansado y medicado" puesto que "su situación sigue siendo grave y necesita tranquilidad".
De hecho, desde el Gobierno piden cautela ante el delicado estado de salud que continúa presentando el político, estable dentro de la gravedad. Y es que según cuentan estas misma fuentes, a la vez que cuentan que a penas ha sido capaz de articular algunas frase sueltas. E insisten en que todavía no esta fuera de peligro. "El paciente tenía numerosas heridas de bala, que deben regenerarse. En este momento su estado está estabilizado, pero realmente es muy grave", indicó la directora del hospital, Miriam Lapuníková, horas antes de la visita de Pellegrini.
Fico fue operado por dos equipos, uno quirúrgico y otro de traumatología, de las múltiples heridas que sufrió, según detalló Lapuníková y recoge el diario 'Denník N'. "En el transcurso de la noche los médicos pudieron estabilizar el estado del paciente", señaló por su parte el ministro de Defensa, Robert Kalinak, que compareció junto a la directora del centro en la localidad de Banská Bystrica. La gravedad del estado del mandatario se debe, según Kalinak, a "la complicación de las heridas sufridas". Unas heridas que han obligado a intervenirle durante cinco horas. Durante la tarde se sabe que se le ha practicado otra.
Este viernes, la cadena TA3 ha informado que Fico "sigue grave aunque su estado se mantiene estable". Fico permanece ingresado en la UCI del hospital Roosevelt de Banská Bystrica, donde fue sometido a una intervención de urgencia de cinco horas tras el atentado. El jueves pudo hablar brevemente con el presidente entrante, Peter Pellegrini, con el que no trató asuntos políticos sino "temas personales", señaló Pellegrini.
Aunque no ha sido confirmado por el equipo médico, se especula sobre una posible nueva operación en la cadera del primer ministro, que además de las heridas de los disparos tuvo en el pasado insuficiencias cardíacas que le obligaban a medicarse.
El agresor, imputado por intento de asesinato
Fico fue tiroteado este miércoles en la ciudad de Handlová por un hombre de 71 años, que fue detenido y aseguró estar en contra de las políticas del Gobierno. "No estoy de acuerdo con la política del Gobierno. La RTVS está siendo atacada y mucha gente está presentando la dimisión", dijo a la cadena TA3 el supuesto tirador, Juraj Cintula, cuando era llevado a comisaría a declarar. Cintula sería un escritor de 71 años miembro de la Asociación de Escritores Eslovacos y fundador de un grupo literario.
Las autoridades le han imputado este jueves un delito por intento de asesinato por venganza y motivación política., con lo que se expone a una pena de 25 años de cárcel. El detenido se encuentra en una celda en la cárcel de Nitra, según la cadena de televisión 'Markiza TV', que recoge que el sospechoso habría confesado a la Policía que planificó el ataque días antes, si bien ha negado que su objetivo fuera asesinar al mandatario, sin que las autoridades se hayan pronunciado al respecto.
Además, la policía también detuvo este miércoles a una mujer que asegura ser la esposa de Cintula, según informaron varios medios locales y ha recogido la agencia Reuters. Por el momento no se conocen más detalles de esta detención ni implicación, puesto que el mismo Gobierno insiste en que Cintula actuó solo.
El Gobierno apunta a un ataque político
Por otra parte, aún no se ha determinado quién asumirá las competencias del jefe del Gobierno. De momento, la actividad parlamentaria se ha cancelado hasta el martes, cuando estaban pendientes de votación controvertidos proyectos de ley muy criticados por la oposición progresista y liberal. Dicha oposición canceló la víspera una protesta callejera contra la abolición del ente público RTVS que se tramita en el Parlamento eslovaco a iniciativa del Gobierno de coalición entre nacionalistas de izquierdas y ultraderechistas.
Varios miembros del Gobierno han asegurado que el ataque a Fico es político y han acusado a la oposición de caldear el ambiente con sus críticas. El país, muy polarizado, ha visto protestas multitudinarias en las últimas semanas contra decisiones controvertidas del Gobierno de izquierda nacionalista y ultraderecha como el cierre de la Fiscalía Anticorrupción, que investigaba a miembros del partido de Fico, y los planes para clausurar la RTVS.