Con una enorme mochila cargada de explosivos, camina entre la multitud. Salen a la luz las primeras imágenes de uno de los terroristas suicidas, justo antes de llevar a cabo el ataque.
Llega a la abarrotada iglesia de Negombo, entra y momentos después se hace estallar asesinando a decenas de personas. Daésh ha reivindicado los ataques. El Gobierno cree que querían vengar los atentados en dos mezquitas de Christchurch, Nueva Zelanda, el mes pasado.
Ahora, la eficacia de los servicios secretos de Sri Lanka está en entredicho. El 11 de abril fueron alertados de posibles ataques a iglesias, pero el Gobierno nunca fue informado y no se tomaron medidas.
Mientras, dolor y lágrimas en Rianxo, localidad de Alberto Chaves, que ha perdido la vida en los atentados junto a su novia, la también gallega, María González. Empiezan los tres días de luto oficial por ellos. Su repatriación aún se demorará varios días.
