Una marcha hacia el Palacio de La Moneda, la sede del Ejecutivo, para expresar frente a la sede del Gobierno el descontento social, ha acabado en un gran incendio de un centro comercial en pleno centro de Santiago después de horas de disturbios y barricadas.
El centro comercial ha sido saqueado primero y, posteriormente, se ha iniciado un incendio en su interior que ha amenazado con propagarse a los edificios colindantes, lo que ha sido evitado por los bomberos.
El acto estaba convocado con el objetivo de que la gente se agolpara frente a los muros de La Moneda para mostrar el descontento social, pero la respuesta de Carabineros (Policía militarizada) contra la protesta ha provocado que los manifestantes quedaran a unos 200 metros del palacio de Gobierno.
En ese lugar, las fuerzas del orden han reprimido la protesta, que abarcaba casi un kilómetro por el centro de la Alameda Bernardo O'Higgins, principal arteria de Santiago, para que no pudieran llegar hasta La Moneda.
Las barricadas ardiendo en medio de la avenida comenzaron a multiplicarse mientras los manifestantes tiraban piedras a la policía y esta respondía con gases lacrimógenos y los carros lanza-agua, conocidos popularmente como 'guanacos'.
En medio de los enfrentamientos, encapuchados han forzado la malla metálica del cierre del centro comercial y han saqueado el recinto, de unas tres plantas, misma situación que se había vivido en horas antes en farmacias y algunos comercios de la zona.
Tras el saqueo, se ha registrado un incendio en el interior del establecimiento, principalmente ocupado por tiendas de ropa, lo que ha propagado una inmensa humareda en un principio y la propagación del fuego momentos después-
El fuego ha alcanzado a dos edificios altos de oficinas colindantes pero el cuerpo de Bomberos Voluntarios ha evitado que las llamas se extendieran más allá del centro comercial. A su vez, se ha reproducido otra protesta en la Plaza Italia, epicentro del estallido social que este martes cumple 12 días consecutivos de manifestaciones, que han dejado ya un saldo de 20 fallecidos, entre ellos seis ciudadanos extranjeros.
En ese lugar, los manifestantes han prendido un inmenso fuego en la verja del acceso a la estación de Metro Baquedano, en cuyo interior presuntamente la Policía habría torturado a algunos detenidos, según denuncias recibidas de las propias víctimas.