El peso argentino se desplomó y esta es la respuesta: la gente saliendo a la calle reclaman una subida del salario mínimo en medio de los crecientes temores del incumplimiento de la deuda.
La crisis financiera se ha grabado en Argentina desde las elecciones primarias donde el presidente Macri fue derrotado por el candidato peronista Alberto Fernández.
En sólo tres semanas, Argentina ha perdido algo más de 10.000 millones de dólares de reservas, que rondan los 56.000 millones de dólares, una sangría que en parte se explica por las divisas volcadas por el Banco Central al mercado para tratar de estabilizar el tipo de cambio.
Otra buena porción se ha aplicado a la cancelación de deudas. Por la crisis, la tasa de renovación de la deuda de corto plazo emitida por el Tesoro cayó drásticamente del 88 al 10 %, aumentando la presión sobre los compromisos de pago del país.