El ministro de Sanidad británico, Matt Hancock, ha anunciado la imposición de un bloqueo sobre la ciudad de Leicester y el cierre de sus comercios y colegios en el que es ya el primer foco localizado para el que se decretan restricciones específicas en Reino Unido por el incremento de los contagios.
"No podemos recomendar que la relajación del cierre nacional" previsto a partir del 3 de julio se aplique en Leicester, ha explicado Hancock en comparecencia en el Parlamento, por lo que todos los comercios no esenciales deberán cerrar a partir de este martes y los centros educativos cerrarán desde el jueves. Solo admitirán a alumnado vulnerable o de trabajadores esenciales.
Del mismo modo se prohíbe todo viaje no esencial desde y hacia Leicester. La medida, que afectará a los más de 300.000 habitantes de la ciudad, se revisará en un plazo de dos semanas. La gente de Leicester deberá "quedarse en casa lo máximo posible", ha indicado Hankock, que ha anunciado además la instalación de un centro de pruebas del coronavirus para personas con síntomas.
Además, el ministro Hancock ha advertido de que otras ciudades podrían seguir a Leicester si hay nuevos focos. "El brote ha llevado a un contagio de comunidad y por eso hemos tenido que tomar más medidas. No quiero tener que tomar este tipo de acciones, pero estamos perfectamente preparados para hacerlo", ha añadido.
Leicester concentra el 10% de todos los casos registrados en Reino Unido en la última semana y tiene 135 positivos por cada 100.000 habitantes.