Reino Unido se convierte en el primer país del mundo en infectar a personas sanas con coronavirus. Se trata de un estudio en el que participan 90 jóvenes, de entre 18 y 30 años, todos ellos voluntarios de un estudio médico que permitan saber qué vacunas y tratamientos funcionan mejor a la hora de vencer a la enfermedad.
Los voluntarios que participarán en el estudio deben tener buena salud, ninguna patología, no haber tenido contacto con el virus y tampoco haber sido vacunados.
Los expertos ya trabajan con el primer grupo de voluntarios, a los que se les contagiara con el COVID-19 inoculando una pequeña cantidad de virus a través de la nariz para reducir los riesgos. Durante las dos primeras semanas, estos pacientes estarán en tres hospitales de Londres monitorizados en todo momento. También se les hará a diario análisis de sangre y raspados nasales, además de pruebas de olfato y test cognitivos. Y serán pasados 14 días cuando recibirán el alta, aunque tendrán un seguimiento de un año para estudiar los efectos a largo plazo.
Como compensación económica, recibirán unos 5.000 euros por todo el año que dura este proceso que ha contado con el visto bueno del comité bioético británico. Un hecho que genera dudas en algunos expertos como el virólogo José Antonio López, para se plantea lo correcto de "usar a seres humanos como animales de experimentación". El periodista Mario Viciosa va más allá y habla del riesgo que tiene contagiar una enfermedad para la que no existe cura.
Se trata de un tipo de estudios que no son nuevos, puesto que antes se hizo con la gripe o la malaria. Sin embargo, en esos casos los voluntarios recibían antes la vacuna.