Reino Unido registra el día más trágico desde que comenzó la crisis sanitaria del coronavirus: 980 nuevas muertes en tan solo 24 horas. El país se acerca así a las 9.000 defunciones por el COVID-19.
Unos datos negativos que llegan a la vez que las buenas noticias sobre la recuperación del primer ministro, Boris Johnson, que abandonó ayer, jueves, la UCI y cuyo estado sigue mejorando en el Hospital de Saint Thomas, donde ingresó el pasado domingo.
Según el último parte oficial de Downing Street, el 'premier' ha podido dar este viernes sus primeros pequeños paseos y sigue "con buen ánimo".
El lunes concluyen las tres primeras semanas de confinamiento en el Reino Unido, pero se da por hecho que se prolongarán, ya que el pico de la pandemia allí no se prevé hasta el 20 de abril. Por el momento, el Ejecutivo ha reiterado a la ciudadanía la petición de quedarse en casa durante la Semana Santa.