La GSMA, la organizadora del Mobile World Congress, se ha reunido de forma urgente este miércoles y ha decidido cancelar el evento ante la sangría de empresas que han anunciado que no asistirán en prevención por elbrote de coronavirus, aunque se ha garantizado que el evento volverá a celebrarse en la ciudad condal en 2021.
Los organizadores del MobileWorld Congress (MWC) toman esta decisión a pesar de afirmar horas antes que estaban monitorizando el desarrollo "rápido y cambiante" del coronavirus: "El nuevo coronavirus es una situación que cambia rápidamente, que GSMA está monitoreando de cerca. Esto incluye reuniones periódicas con expertos en salud globales y españoles, así como con nuestros socios"para garantizar el bienestar de los asistentes", apuntan en un comunicado.
Por su parte, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, también tranquilizaba a los visitantes y participantes del Mobile World Congress de Barcelona (MWC) y consideraba que no veía necesario tomar más medidasde protección de la salud pública que las decididas hasta ahora.
"La GSMA ha cancelado el MWC Barcelona 2020 porque la preocupación global respecto al brote de coronavirus, viajar y otras circunstancias, hacen imposible para la GSMA celebrar el evento", ha expuesto Hoffman en un comunicado este miércoles.
Hoffman ha indicado que la GSMA y las administraciones implicadas continuarán trabajando "al unísono" y apoyándose las unas a las otras para la edición 2021 del Mobile y las siguientes. El consejero delegado de la GSMA ha agregado que las administraciones "respetan y entienden" la decisión de cancelar el salón internacional, y que desde la asociación están con aquellos afectados en China y en todo el mundo por el virus.
Nuevas bajas
Más de una veintena las empresas, entre ellas pesos pesados como AT&To Sony, habían cancelado por esta epidemia su participación en el Congreso Mundial de Móviles (MWC) de Barcelona, que está previsto que comience el 24 de febrero. Este mismo miércoles también lo han anunciado British Telecom, Deutsche Telekom, Nokia y Rakuten.
Desde el pasado jueves,cuando la surcorena LG anunció que no iba a asistir al evento, más de una veintena de empresas han ido sumándose a no participar en el mismo. La mitad de estas cancelaciones se han producido en los últimos días, comenzando con las estadounidenses Intel y finalizando, hasta el momento, con Facebook y Cisco. Este martes se ha registrado también la primera baja de una empresa española, concretamente de Aragón, Telnet Redes Inteligentes.
Los efectos de esta decisión la están sufriendo otras empresas, como las de vehículos de alquiler con conductor (VTC), que han visto como se han cancelado un 12% de las reservas programadas en Cataluña, tal como explicó el presidente de la patronal Unauto en esta comunidad autónoma, Josep Maria Goñi.
También la patronal Pimec ha alertado de las posibles consecuencias para las pequeñas y medianas empresas (pymes), que preveía para este año generar un impacto cercano a los 500 millones de euros y crear unos 14.000 puestos de trabajo. Este lunes, también advirtieron de los efectos de estas anulaciones los hoteleros de Barcelona, así como el sector de la restauración.
Coste económico
El año pasado asistieron 2.400 empresas. El coste de la cancelación se estima en unos 500 millones de euros, en cuanto a expositores, entradas al MWC, viajes, dietas, hoteles y presentaciones. El Gobierno, este martes, decía ser partidario de que el Mobile se celebre "con normalidad" pese a la amenaza del coronavirus y a las cancelaciones de varias empresas tecnológicas. La ministra portavoz, María Jesús Montero, insistía en que "la situación de riesgo en España es baja".
El coste de la cancelación del congreso puede ascender a los 500 millones de euros.
"No hay restricciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), por lo que los eventos internacionales puedes celebrarse con normalidad", decía la ministra portavoz, María Jesús Montero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Ha recordado que en España "solo se han registrado dos casos de contagio y que los afectados son personas que contrajeron la enfermedad en el extranjero".