Tras su encuentro en Washington

El rey de Jordania se niega a aceptar los planes de Trump y trata de calmarle con la acogida de 2.000 niños palestinos enfermos

Entre líneas Con este gesto el mandatario árabe busca apaciguar al republicano después de que haya intensificado la presión para que Jordania y Egipto reciban a refugiados palestinos y así él poder convertir el enclave en la "Riviera de Occidente".

El rey de Jordania junto a Donald Trump en su reunión de este martes en la Casa Blanca.El rey de Jordania junto a Donald Trump en su reunión de este martes en la Casa Blanca.Alex Brandon - AP

El rey de Jordania, Abdalá II, ha anunciado este martes que su país acogerá a 2.000 niños enfermos de la Franja de Gaza en un intento de apaciguar al presidente de Estados Unidos (EEUU), Donald Trump, quien ha intensificado la presión sobre el reino para que reciba a refugiados palestinos. Un paso que el republicano necesita llevar a cabo sus pretensiones "inmobiliarias" de tomar Gaza.

Al inicio de la reunión en el Despacho Oval de la Casa Blanca, Abdalá II, que trató en varias ocasiones con Trump durante su primer mandato (2017-2021), ha afirmado que Jordania acogerá "lo antes posible" a 2.000 niños que están recibiendo tratamiento contra el cáncer u otras enfermedades y que actualmente se encuentran en la Franja de Gaza. El gesto, de evidente cálculo político, ha sido bien recibido por Trump, quien lo ha calificado de "realmente hermoso".

Sin embargo, Trump está a lo suyo y ha aprovechado para reiterar su plan de que EEUU tome el control de la Franja, devastada tras 15 meses de guerra con Israel, y la reconstruya para convertirla en lo que ha descrito en otras ocasiones como una "Riviera de Oriente Medio", tras reubicar a los palestinos en países vecinos como la propia Jordania y Egipto. "Vamos a tenerlo, vamos a mantenerlo y vamos a asegurarnos de que haya paz, que no haya problemas, que nadie lo cuestione", ha aseverado Trump sobre Gaza, insistiendo en que su plan traerá "paz" y "empleo" a Oriente Medio.

Y mientras el magnate hacía estos comentarios, Abdalá II, sentado a su lado, lo escuchaba atento, aunque evitando llevarle la contraria en público. De hecho, ante la insistencia de los periodistas, se limitó a señalar que esperará a que Egipto presente sus propuestas antes de pronunciarse, al tiempo que ha subrayado que haría "lo mejor" para su país. Más tarde, ha reiterado su rechazo a la idea de Trump.

Presiones a Jordania y Egipto

Precisamente, se esperaba que uno de los puntos más polémicos del encuentro entre ambos mandatarios fuera la posibilidad de que Washington recorte la ayuda financiera a Jordania y Egipto como medida de presión para que acepten más refugiados palestinos, una opción que Trump presentó como posible este lunes, pero que también ha reiterado este martes.

Durante la jornada previa, al ser preguntado por la prensa sobre si consideraría reducir la asistencia a Egipto y Jordania en caso de que rechazaran su plan, Trump respondió: "Sí, tal vez. Claro, ¿por qué no?", y añadió: "Si no están de acuerdo, podría retener la ayuda. Sí". Sin embargo, este martes, el presidente dio marcha atrás y aseguró que no suspendería la asistencia a Jordania ni a otros países árabes si se niegan a acoger a más refugiados procedentes de Gaza. "No tengo que amenazar con eso. Creo que estamos por encima de eso", afirmó.

Jordania y Egipto están entre los principales receptores de asistencia militar y económica de EEUU. Prueba de ello es que solo en el año fiscal 2023, Washington destinó aproximadamente 1.500 millones de dólares a Egipto y casi 1.700 millones a Jordania, según datos del Departamento de Estado.

Jordania acoge a más de dos millones de palestinos desplazados por conflictos anteriores y, pese a su respaldo a la causa palestina, se ha resistido a recibir más refugiados, al considerar que ello pondría en riesgo su estabilidad y podría derivar en la creación de una patria alternativa para los palestinos.

De alto el fuego al "infierno" de Trump

Otro de los temas centrales del encuentro ha sido la situación del alto el fuego en la Franja de Gaza, en un momento crítico después de que Hamás amenazara con suspender el intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos previsto para este sábado 15, alegando incumplimientos por parte de Israel. Un anuncio que ha llevado a a Trump a reiterar su sugerencia de que el alto el fuego podría cancelarse si Hamás no libera a todos los rehenes que aún mantiene retenidos antes del mediodía del sábado.

"No creo que vayan a cumplir con el plazo, personalmente. Creo que quieren hacerse los tipos duros, pero veremos qué tan duros son", dijo Trump, quien acusó a Hamás de comportarse como "matones". De hecho, ha asegurado que de no darse esa liberación el enclave palestino podría convertirse "en un infierno". Palabras secundadas por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, tras una reunión de urgencia con su gabinete de defensa en la que se ha concluido que haría saltar por los aires el alto el fuego si Hamás no cumple.

De esta manera, la postura de Trump sobre la Franja de Gaza ha introducido un nuevo elemento de complejidad en las negociaciones para mantener el alto el fuego, en un conflicto que ha dejado más de 46.000 palestinos muertos por los bombardeos israelíes. Trump presentó su plan para Gaza el pasado 4 de febrero en la Casa Blanca junto Netanyahu, el primer líder extranjero que recibió tras su retorno al poder el 20 de enero, mientras que Abdalá II ha sido el primer líder árabe y tercer mandatario extranjero en reunirse con el estadounidense.