Apenas 10 segundos tardó en engullirlo todo el humo en el centro comercial de Siberia. El fuego atrapó a decenas de familias que pasaban la tarde en Kemérovo. 64 víctimas mortales, 41 de ellas niños, es el trágico balance del incendio.

Las alarmas no sonaron puesto que habían sido desactivadas previamente y los guardas fueron los primeros en huir del lugar; con lo que los clientes se toparon con unas salidas de emergencia bloqueadas ilegalmente.

Entre el pánico y la desesperación, algunos trataron de escapar de las llamas y el humo arrojándose por las ventanas del edificio. Es el caso del propio Sergei, un niño de 11 años que ha salvado su vida de milagro, aunque se ha quedado en coma y huérfano: su familia al completo ha muerto en el incendio.

Niños y niñas como él suponen la mayoría de los fallecidos en la tragedia: al menos 41 de los 64 identificados son menores de edad, debido sobre todo a que el fuego se cebó con los multicines y el área infantil.

El incendio se investiga ya como una negligencia criminal. Cuatro personas han sido arrestadas, incluyendo dos trabajadores de la empresa de seguridad e incendios y la arrendataria del centro, construido al parecer entre irregularidades y sobornos.

Por el momento, el presidente Vladimir Putin ha visitado a las víctimas y ha prometido justicia e indemnizaciones a las familias. Lo ha hecho entre protestas por las circunstancias en las que se produjo la tragedia.

Imagen del centro comercial incendiado

Un guardia desactivó las alarmas del centro comercial de Siberia

Un guardia desactivó el sistema de alarmas del centro comercial de la localidad siberiana de Kemerovo que se incendió el domingo, según ha confirmado este lunes el Comité de Investigación ruso.

"El caso del quinto sospechoso, un empleado de seguridad que apagó el sistema de alarmas durante el incendio, está siendo investigado", ha señalado la portavoz del comité tras admitir que las salidas de emergencia del centro también fueron bloqueadas.

El incendio, que arrasó unos 1.500 metros cuadrados, se habría originado en el cuarto piso del centro comercial, donde se encuentran las salas de cine y los espacios recreativos infantiles.