Las autoridades vietnamitas subieron este miércoles a 141 los muertos a causa del tifón Yagi en Vietnam, mientras que Hanói se encuentra en alerta ante el riesgo del aumento de inundaciones por la crecida de dos ríos que atraviesan la capital.

El tifón Yagi golpeó en Vietnam el sábado y el domingo ya fue rebajado a depresión tropical, pero el temporal siguió dejando lluvias que han provocado graves inundaciones, corrimientos de tierra y caída de árboles en el norte del país. Según la última parte de emergencia citada por la televisión gubernamental vietnamita (VTV), la mayoría de las víctimas mortales se encuentran en las provincias de Cao Bang, Lao Cai y Ten Bai, mientras que en Hanói solo se produjo un fallecido.

El número de desaparecidos asciende a 59, incluidas ocho personas que cayeron a un río después de que el lunes se desplomara un puente por el que transitaban vehículos en la provincia norteña de Phu Tho, que dejó al menos un muerto. Además, se cuentan más de 760 heridos y daños en unas 48.000 viviendas y 150.000 hectáreas de arrozales. En Hanói, afectada por las inundaciones, las autoridades temen que las riadas afecten a más distritos del centro ante el riesgo de desbordamiento de los ríos Rojo y Duong.

Más lluvias

En un comunicado, la ONG local Blue Dragon afirmó que tuvo que evacuar su oficina en Hanói por las inundaciones, pero que sus equipos siguen prestando ayuda a decenas de familias y niños afectados por el temporal en el norte del país. Aunque la depresión tropical ya se encuentra fuera de Vietnam, la agencia de meteorología vietnamita anunció hoy en Facebook más lluvia de nivel ligero a fuerte, así como vientos vigorosos, en el norte del país, donde hay muchas aldeas afectadas en remotas zonas montañosas.

Los servicios de emergencias continúan trabajando para ayudar a millas de afectados y desplazados por el Yagi, que fue el tifón más fuerte este año en Asia y llegó a Vietnam con ráfagas de viento de hasta 149 kilómetros por hora. Antes de la llegada del tifón, las autoridades evacuaron a unas 50.000 personas y casi medio millón de soldados fueron movilizados para ayudar en tareas de emergencia.

En su ruta hacia Vietnam, el tifón atravesó el viernes pasado la provincia insular china de Hainan, donde causó al menos dos muertos y 92 heridos, y previamente cruzó el norte de la isla filipina de Luzón, en la que se encuentra Manila, donde los equipos de emergencia informaron de 20 muertos, 26 desaparecidos y 22 heridos. Convertido en depresión tropical, el temporal se ha alejado estos días hacia Birmania (Myanmar).