Buzos en el Hudson

Testigos del accidente de helicóptero en el Hudson apuntan a bandadas de pájaros como causa del impacto

Sí, pero
Las autoridades continúan con la investigación sobre lo sucedido, aunque para evitar la "especulación" no están ofreciendo demasiados detalles. Esto es lo que se sabe.

Continúa la investigación sobre el accidente de helicóptero en Nueva York en el que murió una familia española.Continúa la investigación sobre el accidente de helicóptero en Nueva York en el que murió una familia española.Agencia EFE

La investigación sobre el trágico accidente de helicóptero en el que murió una conocida familia de Barcelona, y el piloto que dirigía el aparato que cayó a aguas del río Hudson el pasado jueves continúa. Si bien se va avanzando en las pesquisas, las autoridades se muestran muy reacias a ofrecer detalles sobre su curso o las hipótesis principales que se manejan respecto a lo ocurrido.

Por un lado, los investigadores se encuentran analizando varios informes de testigos que han señalado haber visto algunas bandadas de pájaros en el momento del accidente, pudiendo haber sido las causantes. Por otro lado, también se conoce que el piloto Johnson había avisado minutos antes que se estaba quedando sin combustible, siendo también otra opción. Además, se ha apuntado que Johnson tenía 788 horas de vuelo total, pero desconoce cuántas en el helicóptero Bell accidentado. Entonces, su inexperiencia también podría haber sido detonante del accidente.

No obstante, el alcalde de Jersey City, Steven Fulop, no ha señalado esta como una teoría sobre lo sucedido, pues señaló que se "discutió sobre tres". "Estaba el debate sobre un posible percance con pájaros, o con drones o algún fallo mecánico. Veremos qué sucede", aseguró, sin aclarar si estas teorías siguen siendo las principales en la investigación.

Buzos en el Hudson

Sí se conoce, tal y como ha confirmado la agencia EFE, que durante la jornada de este sábado varios equipos de buzos estuvieron el área en la que impactó la aeronave con el fin de recuperar partes de la aeronave y adelantar otros pasos en la investigación de la que es responsable la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB). Precisamente, el organismo detalló que desde el viernes han desplegado un equipo de 17 profesionales, que barajan varias hipótesis pero que "se quiere evitar la especulación" y ofrecerán más detalles próximamente.

Unas operaciones que continúan durante la jornada de este domingo para encontrar otras partes del helicóptero como ya hizo la policía de Jersey City en su costa, al recuperar trozos de metal, un chaleco salvavidas, un asiento y otras pertenencias. Eso sí, los investigadores creen que todavía quedan componentes como el rotor y el rotor de cola, sobre los que piensan podrían estar sumergidos a aproximadamente 12 metros de profundidad.

Mientras las labores continúan en el agua, también lo hacen tierra. Y es que NTSB explicó que sus investigadores han comenzado a evaluar el sistema de control de vuelo del aparato, puesto que ningún sistema de aviónica a bordo de la aeronave registró información que pudiera utilizarse para la investigación. Además, algunos de sus trabajadores ya se han reunido con representantes de la empresa que brindaba el servicio para investigar a fondo sus operaciones.

Lo que sí se sabe

La estrepitosa caída del helicóptero al agua, en la que se pudo ver cómo perdía partes de su fuselaje en el aire, se produjo entorno a las 15:15 hora local (19:15 GMT) del pasado jueves. Un impacto que provocó la movilización de los buzos del cuerpo de bomberos, así como de la Policía de Nueva York y de la vecina Nueva Jersey, que sacaron del río a las víctimas y a la aeronave siniestrada.

El helicóptero despegó desde la parte baja de Manhattan en dirección al sur, antes de volar hacia el norte hasta el puente George Washington, y después volvió a dirigirse hacia el sur siguiendo la costa de Nueva Jersey, cuando perdió el control a la altura de la ciudad de Hoboken. Un impacto del que no pudo salvarse la familia española fallecida que conformaban los ejecutivos de Siemens España Agustín Escobar y su esposa Mercè Camprubí, así como por sus tres hijos menores de 10, 8 y 4 años. Tampoco se salvó el piloto, un militar afroamericano de 36 años.

Ofrenda a orillas del Hudson

Este sábado, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, y Joan Camprubí, hermano de Mercè, realizaron, junto a otras autoridades, una ofrenda floral en el cauce fluvial como homenaje a los fallecidos. Adams y Camprubí exteriorizaron su dolor compartido en una comparecencia ante la prensa, pero no se aportaron nuevos detalles de la investigación.

El accidente ha despertado nuevamente un intenso debate sobre la regulación de la actividad de los llamados "vuelos no esenciales", que incluyen a los helicópteros turísticos y a los "taxis aéreos" que permiten saltarse el engorroso tráfico de Manhattan para llegar más rápido al aeropuerto y a las playas más cercanas. Este tráfico sumó el año pasado unos 80.000 vuelos sobre Manhattan, que fueron protagonizados por personas con alto poder adquisitivo, toda vez que cada vuelo cuesta, como mínimo, 250 dólares por persona y trayecto.