El expresidente de Estados Unidos y candidato republicano en las elecciones de noviembre, Donald Trump, empieza a calentar su cara a cara con el actual jefe de la Casa Blanca, Joe Biden, y lo ha hecho con unas acusaciones muy graves, insinuando que su rival consume drogas.
A un mes del debate por las presidenciales de Estados Unidos, Trump incluso ha ido más allá, y ha declarado que en su discurso anual, Biden estaba drogado, motivo por el que va a pedir que se someta a un test antidrogas antes de sus dos debates.
"(Biden) no puede hablar, no puede caminar y no puede ni juntar dos frases. Yo solo quiero debatir con este tipo, y voy a pedir una prueba de drogas. No quiero que venga como durante su discurso anual, en el que estaba más volado que una cometa", ha manifestado el expresidente de Estados Unidos.
Además, el candidato republicano volvió a recurrir este viernes a la acusación, sin pruebas, de un "amaño electoral" en el proceso electoral de 2020, cuyos resultados sigue sin reconocer. Durante un mitin de campaña celebrado en St Paul (Minesota), el exmandatario afirmó que en los comicios de ese año ganó con mucho margen, si bien los resultados oficiales revelan que perdió por más de 200.000 votos contra su oponente, el actual presidente de EEUU, el demócrata Joe Biden.
"Tenemos que tener cuidado, tenemos que vigilar esos votos", alertó en este estado, al que, como muchos medios locales recordaron este viernes, juró no volver tras conocerse los resultados de las elecciones de 2020. El republicano prometió que de resultar ganador en las presidenciales de este año, implantará una identificación electoral, un requisito que los demócratas no quieren porque, dijo, quieren seguir "engañando".
Como es una constante en sus mítines, Trump volvió a despotricar -y con duros calificativos- contra Biden, a quien considera "el peor presidente en la Historia de Estados Unidos" y a quien acusa de "corrupto" y emprender un gestión económica "terrible".