Trump responsabiliza de los incendios de Los Ángeles al gobernador de California por "proteger a un pez inútil" y se olvida de la sequía y del recorte en bomberos

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha salido en busca de culpables de los devastadores incendios que están arrasando Los Ángeles y que ya dejan cinco muertos y más de 2.000 edificios destruidos. El líder de los Republicanos no ha perdido la ocasión de atacar la gestión que se está haciendo y lo ha hecho como lo suele hacer él: tirando de bulos.

Trump ha asegurado que el fuego está campando a sus anchas por Los Ángeles porque el gobernador demócrata de California, Gavin Newsom, ha destinado los recursos hídricos a proteger a un pez -el eperlano- y que esto ha hecho que no haya suficiente agua para hacer frente a los incendios que devastan la ciudad.

"Quería proteger a un pez inútil", le ha acusado Trump, quien no tiene en cuenta de que se trata de una especie autóctona de la zona y está en peligro de extinción. "No le ha importado la gente de California", ha agregado. "Ahora se está pagando el precio máximo. Él es el culpable de todo esto", ha señalado.

"(Newsom) tendría una gran cantidad de agua que mandaría al Pacífico porque trata de proteger a un pez pequeño, que está en más lugares, llamado eperlano. Y por protegerlo no hay agua en Los Ángeles", ha manifestado también el presidente electo de Estados Unidos.

Asimismo, en una publicación que hizo en redes sociales acusó a Newsom de haberse negado a firmar una declaración que "habría permitido que millones de galones de agua, provenientes del exceso de lluvia y nieve derretida del norte, fluyeran diariamente a muchas partes de California, incluidas las áreas que están ardiendo de manera apocalíptica".

Unas informaciones que el gobernador de California ha calificado de "pura ficción" y le acusa de "politizar" los incendios de Los Ángeles. "¡Está politizando la tragedia!", ha indicado el demócrata en una entrevista con la CNN desde Los Ángeles. También se ha defendido diciendo que "no están jugando a la política" y que está centrando su atención en que "los bomberos tengan todos los recursos que necesitan".

A lo que no ha hecho mención Donald Trump en sus acusaciones es a la sequía que azota la zona -no llueve desde el pasado 5 de mayo- ni a los fuertes vientos de Santa Ana, que están favoreciendo la rápida propagación de las llamas. También ha sido determinante el recorte de casi 17,5 millones de euros del presupuesto del departamento de bomberos de la ciudad.

En la región, las disputas por el agua, de dónde se saca y a qué se destina, son frecuentes. Mucha proviene de la bahía norte de California, donde, para los conservacionistas, el bajo número de eperlanos es señal de que el ecosistema está cerca del colapso.