Diplomacia al estilo Trump

Sin Ucrania y ¿sin Rusia? La reunión 'fantasma' de Trump para empezar a negociar el fin de la guerra

Interrogantes Trump anunció una reunión de alto nivel en Múnich con representantes rusos y ucranianos. Zelenski asegura no saber nada de ese encuentro y no hay enviados de Rusia en la conferencia de la capital bávara, al menos que se sepa.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump

Todo apunta a que la primera reunión para acabar con la guerra en Ucrania va a ser sin Ucrania... y puede que también sin Rusia. Fiel a su estilo, Donald Trump anunciaba este jueves, con pocas horas de antelación, un encuentro de alto nivel entre Estados Unidos, Rusia y Ucrania en Múnich, que desde este viernes acoge la Conferencia de Seguridad. Kyiv, sin embargo, descarta que haya conversaciones previstas con los rusos y el Kremlin, a su vez, niega la presencia de una delegación en la conferencia.

Trump, sin embargo, lo anunciaba alto y claro la víspera desde el Despacho Oval. "Habrá una reunión en Múnich. Rusia estará allí con nuestra gente. Por cierto, Ucrania también está invitada", aseguró el mandatario republicano. "No estoy seguro exactamente de quién estará allí de cada país", reconocía el magnate neoyorquino, que no obstante insistía: "Pero habrá gente de alto nivel de Rusia, Ucrania y Estados Unidos".

Aunque Trump, aparentemente, contaba con Ucrania, Kyiv aseguró ya el jueves que no había "conversaciones previstas con los rusos en Múnich". Dmitró Litvin, asesor del presidente Volodímir Zelenski, recalcó que su país "debe hablar primero con Estados Unidos" y que, además, "Europa debe formar parte de cualquier conversación seria para una paz genuina y duradera". "No nos reunimos con los rusos en una mesa vacía", recalcó.

El propio Zelenski insistía este viernes en que no le consta esa reunión a tres bandas, que, al menos de momento, solo existe en palabras de Trump. "No sé nada de esto. ¿Igual alguien sabe más que yo?", ironizaba el mandatario ucraniano ante los periodistas en la ciudad alemana, donde también ha advertido de que las conversaciones mantenidas con Trump no son suficientes para desarrollar un plan de paz que pueda negociarse con Rusia.

"No quiero reunirme con los rusos solo por reunirme, ¿para qué? Nosotros vemos el orden de las reuniones así: EEUU, Europa y después Rusia", ha insistido Zelenski, que sí tiene previsto reunirse este mismo viernes con el vicepresidente estadounidense, J.D. Vance, en el marco de esa Conferencia de Seguridad de Múnich. Una cita internacional a la que no asiste Rusia, porque no ha sido invitada oficialmente.

Moscú así lo ha esgrimido este viernes al negar que una delegación oficial rusa vaya a participar en la conferencia. "Los representantes del Ministerio de Exteriores o de otras estructuras oficiales no estarán allí. Lo puedo decir con toda seguridad", ha asegurado la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, que ha recordado que los funcionarios rusos no son invitados a Múnich desde que empezó la guerra.

A la espera de si esa reunión de alto nivel anunciada por Trump se materializa o no, lo cierto es que el presidente ya ha empezado a mover ficha y puesto en alerta a sus aliados. El miércoles, el presidente estadounidense habló por teléfono con el presidente ruso, Vladímir Putin, y anunció un acuerdo para iniciar "negociaciones inmediatas" para poner fin a la guerra en Ucrania. Después habló también con Zelenski, un orden en las conversaciones que no ha pasado desapercibido.

Además, Trump ya ha dejado caer que es poco probable que Ucrania recupere el territorio que Rusia le ha arrebatado y ha alejado la posibilidad de que se una a la OTAN. Una postura que ha llevado tanto a Kyiv como a las potencias de la Alianza a reclamar un hueco en unas conversaciones de paz que de momento se plantean como una negociación bilateral entre Washington y Moscú. Ucrania y Europa, dicen, deben estar en las negociaciones.