El ultraderechista, un polémico candidato por su defensa de la dictadura militar y por sus declaraciones racistas, machistas y homófobas, confirmó su favoritismo, consiguió una votación superior a la pronosticada por los sondeos y le faltó poco para haber sido elegido sin necesidad de una segunda vuelta.
"No teníamos una gran estructura, somos un partido muy pequeño y estuve hospitalizado unos 30 días", por lo que "es un gran triunfo", apuntó el candidato en alusión a los casi 50 millones de votos que le respaldaron.
Bolsonaro disputará la segunda vuelta frente al socialista Haddad
El candidato del Partido de los Trabajadores, escogido a dedo por el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva una vez que no pudo postular por su condición de preso y condenado por corrupción, consiguió garantizar el segundo puesto y su lugar en la segunda vuelta.
De acuerdo a las normas electorales brasileñas, la segunda vuelta es necesaria cuando ningún candidato supera el 50% de los votos.
En tercer lugar, muy lejos de Haddad, se situó el laborista Ciro Gomes, quien obtuvo el 12,47% de los votos válidos. Según las encuestas publicadas, en caso de una segunda vuelta entre Bolsonaro y Haddad, ahora confirmada, ambos estarían empatados en torno a un 45% de los votos.