Alrededor de 54.000 residentes de Brindisi, en el sur de Italia, han tenido que ser evacuados tras el hallazgo de una bomba sin detonar desde la Segunda Guerra Mundial, en lo que se trata de la mayor operación de este tipo realizada en todo el país.
Se estima que más de un 60% del total de la población de la ciudad se han desplazado hasta una distancia segura de 1,6 kilómetros desde el lugar de hallazgo de la bomba, de origen británico y lanzada en 1941.
El artefacto, de un metro de largo y 500 kilos de peso, contiene 40 kilos de dinamita y fue encontrada por pura casualidad durante la remodelación de un cine de la ciudad.
En la operación han participando más de 1.000 policías, 15 expertos artificieros y alrededor de 250 voluntarios de protección civil.
La evacuación ha obligado al cierre del aeropuerto, la estación de tren, dos hospitales y una prisión durante las tareas de desactivación, según informa 'Corriere della Sera'.