Recién perpetrado el ataque, la escena en Nueva York es dramática: en el carril bici yacen personas sin vida, y hay bicicletas tiradas. La gente está aún en shock. Cerca de allí, la camioneta utilizada para atentar está totalmente destrozada. Con este vehículo el atacante mató a ocho personas antes de abandonarla.
Todo sucedió entre las 15:00 y 17:00 horas. El atacante se metió con el pesado vehículo en un carril bici situado en el suroeste de Manhattan. Desde allí, recorrió hasta 14 manzanas, llevándose por delante a todo aquel que se encontraba. Cuando acabó este trayecto, se empotró contra un autobús escolar con niños en su interior.
El terrorista se bajó rápidamente de la camioneta y recorrió armado varios metros hasta que la policía le disparó y logró detenerlo. Varias personas aseguran que gritaba "Alá es grande". "Disparó un par de veces y se produjo un tiroteo con la policía", cuenta un joven, testigo de lo ocurrido. Los agentes lograron herir al sospechoso. El presunto terrorista fue trasladado al hospital. Ahora intentan averiguar todo sobre él.