Migración

Von der Leyen propone acelerar la expulsión de migrantes y prohibir la entrada en la Unión Europea a quienes sean deportados

¿Por qué es importante? La presidenta de la Comisión Europea explica que la propuesta incluirá "una nueva Orden Europea de Retorno" y que abordará la necesidad del reconocimiento mutuo de las decisiones de expulsión dictadas por los Estados miembro.

Ursula von der Leyen

Acelerar la expulsión de migrantes irregulares. Es el objetivo de Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, que ha anunciado este domingo una reforma sobre la política migratoria. Esta reforma incluirá otras medidas como la prohibición de entrada en la UE para aquellos que sean deportados a la fuerza.

El Colegio de Comisarios adoptará el próximo martes en Estrasburgo (Francia) la propuesta de reforma de la que apenas han trascendido detalles y que deberá después ser negociada entre los Veintisiete y el Parlamento Europeo para adoptar su forma definitiva como ley.

La mandataria europea ha avisado de que esta reforma es un "elemento clave" aún pendiente para que funcione el Pacto de Migración y Asilo ya aprobado y ha puesto en valor la importancia de contar con un "verdadero sistema europeo para los retornos", por lo que Bruselas defenderá una reforma legal que ofrezca "reglas simples y claras" que "eviten las fugas y facilite la vuelta de nacionales de terceros países que no tienen derecho a quedarse".

En una rueda de prensa con motivo de los primeros 100 días de mandato que su nuevo Ejecutivo cumplirá el próximo martes, Von der Leyen ha dicho desde Bruselas que la propuesta incluirá "una nueva Orden Europea de Retorno" cuyas claves no ha detallado y que abordará la necesidad del reconocimiento mutuo de las decisiones de expulsión dictadas por los Estados miembro.

"A aquellos que sean retornados por la fuerza se les prohibirá la entrada. Y seremos más estrictos con aquellos que representen un riesgo para la seguridad", ha expuesto la jefa del Ejecutivo comunitario, quien ha prometido que la reforma permitirá al bloque ser "asertivo" pero "asegurando también que actuamos en pleno respeto de nuestras obligaciones bajo el Derecho internacional y los Derechos Fundamentales".

No obstante, la presidenta de la Comisión Europea ha evitado toda referencia a uno de los elementos más polémicos de la reforma; la creación de centros de detención en terceros países para transferir a los migrantes sin derecho a asilo mientras se termina de tramitar su expulsión de la Unión Europea.

En diciembre, Von der Leyen confirmó en una carta a los jefes de Estado y de Gobierno europeos que sus servicios buscarían la "mejor manera de introducir en el marco jurídico" el establecimiento de los 'hubs' en países terceros, teniendo en cuenta tanto su dimensión legal como la operativa y financiera, "respetando al mismo tiempo los Derechos fundamentales".