Usar agua potable para la cisterna del retrete es un lujo que ya no nos podemos permitir. El servicio público de agua de Madrid, el Canal de isabel II, estudia acabar con ello utilizando un sistema de doble tubería.
Se trata de recoger el agua usada de lavadora, fregadero, lavavajillas, ducha y lavabo, filtrarla y almacenarla para luego llevarla a la cisterna del retrete o incluso la lavadora.
Así, cada vez que tiremos de la cisterna ahorraremos diez litros de agua potable. La idea es hacerlo en un futuro en las nuevas construcciones, pero aún no tienen fecha.
A día de hoy, los principales usos de agua reciclada son el riego de calles y jardines. Extenderlo, según el servicio de aguas madrileño, supondría un ahorro equivalente a abastecer a una ciudad de 400.000 personas.