Uno de cada diez niños en España no puede permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días o no se van de vacaciones al menos una semana al año. Así lo ha esclarecido el informe publicado por Plataforma de Infancia 'Análisis de la encuesta de condiciones de vida con enfoque de infancia 2024', el cual confirma que un total de 821.000 niños y niñas en nuestro país tienen carencias materiales severas (CMS).

"Aproximadamente 1 de cada 10 niños, niñas y adolescentes experimentan privaciones materiales severas, lo que supone el porcentaje más elevado de todos los grupos de edad. Esto supone 821 mil menores de edad. El dato para el conjunto del país es del 8,1 %. La carencia material severa (CMS) es el único indicador del AROPE que ha aumentado en el último año, de hecho, se sitúa en su máximo histórico desde que se tienen registros, con niveles superiores, incluso a los de la crisis económica", ha explicado el estudio.

¿Qué requisitos se deben cumplir para entrar dentro de los hogares que tienen carencias materiales? Según lo que explica el Insituto Nacional de Estadística (INE) hay dos rangos dentro de este concepto, la carencia material severa y la carencia material. La diferencia entre ambos es que en el primero se deben cumplir al menos cuatro requisitos de los nueve que se exponen, mientras que en el segundo solo es necesario tres.

Los nueve conceptos que se incluyen dentro del CMS son los siguientes: no puede permitirse ir de vacaciones al menos una semana al año, no puede permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días, no puede permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada, no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos (de 650 euros), ha tenido retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal (hipoteca o alquiler, recibos de gas, comunidad...) o en compras a plazos en los últimos 12 meses, no puede permitirse disponer de un automóvil, no puede permitirse disponer de teléfono, no puede permitirse disponer de un televisor y no puede permitirse disponer de una lavadora.

El único porcentaje que no desciende

A excepción de la tasa de pobreza, los datos del resto de indicadores continúan alejados de los que había en 2008; sin embargo, el informe asevera que hay prestar especial atención a la carencia material severa, que ha duplicado sus valores entre la infancia. Y no es para menos. La gráfica de los últimos años ha hecho saltar las alarmas, en especial al entrar en la ecuación los menores de edad. Si se compara con el año previo a la pandemia, en el 2019 la carencia material severa rondaba el 6%. En tan solo un lustro, la cifra casi se ha duplicado. Unos datos sangrantes y más viéndolo con retrospectiva. En el año 2015 el porcentaje era del 9,1%, mientras que el 2008 el dato era del 5,5% de los menores de edad en España.

Esto se traduce en que los hogares con niños, niñas y adolescentes, en líneas generales, no tienen la capacidad para afrontar gastos imprevistos. Para ser exactos el 57,2 % de hogares monoparentales no pueden hacer frente a agravios económicos superiores a 650 euros, el 43,7 % de otros hogares con niños y niñas dependientes y el 33,7 % de hogares compuestos por 2 adultos y uno o más niños dependientes. No solo eso, sino que el 48,3 % de los hogares monoparentales y el 41,1 % de “otros hogares con niños dependientes” no pueden acceder a salir de vacaciones al menos una semana al año.

"La pobreza energética es otro factor que afecta a estos hogares y, sobre todo, a los monoparentales ya que más de un cuarto de ellos no pueden permitirse mantener la vivienda a una temperatura adecuada. Más del 19 % de los hogares monoparentales y de otros hogares con niños, niñas y adolescentes ha tenido retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda en los últimos 12 meses", ha asegurado el informe presentado por Plataforma de Infancia

Es más, el propio estudio ha asegurado que el 2022 ha supuesto un punto y aparte en el CMS, dejando de lado el descenso que se llevaba experimentado desde inicio de 2018: "En el 2022, más de la mitad de las personas con dificultades para llegar a fin de mes, el 52,1 %, tenían privaciones materiales severas, 3 puntos porcentuales más que un año atrás. La serie histórica muestra en el 2022 la ruptura de la tendencia descendente observada desde el 2018. Aunque esta tasa es comparativamente menor a la de la crisis del 2008 y sus años posteriores, las personas en riesgo de pobreza monetaria y con dificultades para llegar a fin de mes manifiestan de manera preocupante carencias materiales en aspectos básico".

En cuanto a la composición de los hogares, aquellos considerados monoparentales carecían al menos de dos de los conceptos que se establecen como básicos, el 32,7 % carecía de tres de estos conceptos y el 15,3 % de 4 de ellos. En la categoría "otros hogares con niños dependientes" estos porcentajes también son muy superiores a la media de hogares, siendo del 40,3% en el caso de cumplir por al menos dos conceptos, el 24% en aquellos que presentan carencia en al menos tres conceptos y el 12,3% en cuatro de las categorías planteadas por el INE.

El alquiler y coste de vida empeoran las cifras de pobreza

No solo los niños son los principales perjudicados, sino que el 2023 ha provocado que la tasa de pobreza se haya incrementado hasta los 12,7 millones de personas, así lo ha recogido el XIV Informe 'El Estado de la Pobreza en España' presentado por la Red de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES). "El riesgo de pobreza o exclusión social -tasa AROPE- ha pasado del 26 % en 2022 al 26,5 % en 2023, 400.000 personas más debido sobre todo al encarecimiento de la vida, como muestra el componente de privación material y social severa de la tasa AROPE".

A pesar de que la subida ha sido ínfima, la realidad es que los datos preocupan y mucho. Cerca de 9,7 millones de personas que residen en España viven con menos de 916 euros al mes por unidad de conusmo. Para las mujeres la situación es aún peor. Los datos evidencian que la feminización de la pobreza es un problema estructural: hay 5,1 millones de mujeres pobres en España, 300.000 más que de hombres.

"Algunos indicadores alertan, a su vez, sobre la realidad que atraviesan millones de familias, como es el caso del 37,1 % de los hogares que no tienen capacidad para afrontar gastos imprevistos, o que casi la mitad de la población (48,7 %) presenta dificultades para llegar a fin de mes. Además, es muy importante el impacto de la pobreza severa, es decir, la población que vive en hogares con ingresos menores a 611 € al mes: mejora en 2023 y prácticamente alcanza el cumplimiento proporcional de los objetivos anuales de la Agenda 2030, sin embargo, afecta todavía a 3,9 millones de personas", ha explicado el estudio.

A pesar de que las cifras no son nada favorables, España podría estar mucho peor si no fuera por la acción directa del Estado. Según el estudio, las medidas que se ponen en marcha desde el Gobierno consiguen evitar que 10,6 millones de personas entren en situación de pobreza, y unos 2,4 millones en pobreza severa.

No solo eso, sino que la constante subida de las pensiones que se equiparan con el incremnto del IPC son cruciales para el sostenimiento de la calidad de vida de la población. Es más, las pensiones reducen el riesgo de pobreza en 16,4 puntos, es decir, unos 7,8 millones de personas.