Abierto el plazo para solicitar las ayudas valoradas en un millón de euros para exhumar fosas de la Guerra Civil y la dictadura; para que se haga justicia en casos como el de Purificación Gallardo León, que busca a su abuelo, represaliado por el franquismo: "En 1940 le asesinaron y le tiraron a una fosa". Su crimen fue ser el alcalde de un pequeño pueblo de Badajoz durante la Segunda Republica.
Ahora, Purificación desea que su padre, que tuvo que emigrar a Australia durante la dictadura, llegue a ver que se inicia el proceso de exhumación: "Son 94 años los que tiene mi padre, y quiero que por lo menos vea que empiezan a localizar y a sacar a su padre. Estas ayudas tienen que solicitarlas los ayuntamientos a través de la Federación Española de Municipios y Provincias, algo que las asociaciones de memoria histórica ven injusto.
"Hay ayuntamientos que no van a querer solicitar este tipo de intervenciones para hacer exhumaciones de víctimas porque en algunos planos se posicionan ideológicamente en contra", ha declarado Miguel Mezquida Fernández, arqueólogo y director de la Asociación Científica ArqueoAntro. En una línea similar se ha expresado Emilio Silva, presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica: "Los derechos humanos no se subvencionan, se garantizan".
Así, tendrán prioridad las fosas con numerosas víctimas, como la de Lora del Río (Sevilla), donde se calcula que hay hasta 600 personas. Entre ellos, los familiares de Alonso Tomeno Morales, miembro de la Asociación Andaluza de Memoria Histórica y Justicia de Lora: "Tengo ocho familiares en la fosa. Lo único que quiero es sacar a mi abuelo y enterrarlo con mi abuela". También tendrán preferencia para conseguir las ayudas aquellas fosas que estén en riesgo de desaparición o que ya se hayan comenzado a investigar.
Búsquedas que en muchos casos han empezado sufragando las propias familias, como Purificación López, que, junto a su padre, lleva años buscando a su abuelo: "Hemos contratado a una máquina excavadora y a un profesional, pero no podemos seguir haciendo el gasto nosotros". Ayudas con las que el Gobierno prevé exhumar 500 tumbas, pero que las familias ven aún insuficientes.