La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha afirmado que los terroristas del 17A lograron hacer daño pero no consiguieron "contagiar su odio" y ha animado a los ciudadanos a demostrar "una vez más" que la capital catalana es una "ciudad de paz" que "no olvidará nunca a las víctimas".
En una declaración institucional la víspera del primer aniversario de los atentados del 17A en Barcelona y Cambrils (Tarragona), en los que murieron 16 personas y más de un centenar resultaron heridas, Colau no ha podido evitar llorar al recordar uno a uno el nombre de los fallecidos: "Los barceloneses siempre os tendremos en nuestro corazón y en nuestra memoria".
"No olvidamos ni olvidaremos nunca a las víctimas", ha resaltado la alcaldesa, que ha animado a los ciudadanos a demostrar mañana, "una vez más", que Barcelona es una "ciudad abierta y solidaria, orgullosa de su diversidad y contraria a la guerra y a la violencia. Una ciudad de paz que con ternura y respeto no olvidará nunca los nombres de las víctimas".
Colau ha resaltado que en los últimos meses el consistorio ha trabajado con "mucho cuidado" para que el acto institucional de mañana, al cumplirse el primer aniversario de los atentados, tenga a las víctimas como "únicas protagonistas". "Hace un año Barcelona sufrió el atentado terrorista más sangriento de los últimos 30 años, después de los de Hipercor", ha recordado Colau, que ha expresado el pésame del consistorio a los familiares y amigos de las víctimas y la solidaridad y compromiso de la ciudad con todas las víctimas y afectados por el atentado.
"No podemos y no queremos olvidarnos de aquellos hechos. No olvidamos ni olvidaremos nunca a las víctimas", ha insistido la alcaldesa. Colau ha calificado el atentado como un "acto sin duda cobarde, que pretendía sembrar el terror en uno de los paseos más queridos y más visitados de nuestra ciudad: La Rambla". "Querían hacernos daño, y lo consiguieron, pero no lograron contagiarnos su odio. No hemos renunciado a nuestros valores ni convicciones, que un año después son más fuertes que nunca", ha resaltado.
Según Colau, Barcelona es y será una "ciudad de paz, una ciudad valiente, que se enfrenta al terror con el amor, una ciudad abierta a todas las personas que huyen de la guerra, el hambre y la violencia". "Somos conscientes de que el terror que vivimos ese día es también el terror al que se enfrentan cotidianamente los ciudadanos de Siria, Iraq, Afganistán o el Yemen", ha reconocido.
La alcaldesa ha recordado que los días posteriores al ataque del 17A fueron "tristes", pero también de "orgullo" de una ciudad que ante las dificultades "sabe sacar lo mejor de sí misma". "Orgullo de una ciudadanía que llenó de forma espontánea las Ramblas de muestras de duelo y llenó plazas y calles al grito de 'no tenemos miedo'. Orgullo de una ciudad que ama a la paz y a la diversidad con la misma fuerza que rechaza la violencia y el racismo", ha exclamado.