El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha negado que el Gobierno no pusiese todos los medios necesarios para permitir la visita de una delegación del PP a Venezuela en calidad de observadores del proceso electoral que se ha vivido allí. En una entrevista en la 'Cadena Ser', Albares afirma que se trata de "una mentira más del PP", explicando cómo ha sido el proceso seguido por el Ejecutivo ante la petición de los 'populares'.

"La solicitud que recibimos del Senado, que iba a ser una misión interparlamentaria, la tramitamos a las autoridades venezolanas, que denegaron esa solicitud. Fue inmediatamente después cuando el PP nos solicitó otra misión. La tramitamos exactamente igual y la respuesta fue la misma. Ellos sabían que iban a ser devueltos. A nosotros nos hubiera gustado que esa misión hubiera podido tener su acreditación, no se veía ningún obstáculo por parte del Ministerio de Exteriores", afirma.

El ministro ha añadido que otros partidos decidieron desistir en la petición de su acreditación, mientras que el PP decidió "seguir adelante".

Este lunes también se ha pronunciado Esteban González Pons al respecto de una expulsión que considera "bochornosa y esperpéntica". "Nos rodearon en todo momento, uniformados y armados. Se produjo una situación casi cómica. Había dos personas que pertenecían a una ONG que estaban allí y que se rieron por nuestros chistes y fueron expulsados por reírse y deportados con nosotros. Nos encerraron en una habitación con la policía política", ha relatado en 'Espejo Público'.

González Pons sí que ha compartido su "preocupación" al haber escuchado a Albares "compartir discurso con Maduro": "Este señor no está a la altura de seguir siendo ministro de Exteriores". "En Venezuela no hace falta visado solo un pasaporte que está en regla. El hecho de que no nos hayan permitido entrar a los ciudadanos libres, es lo que acredita que estas elecciones no eran premeditadamente limpias", ha sentenciado.