Los indultos fueron los protagonistas de la sesión de control al Gobierno de este miércoles. Pablo Casado y Pedro Sánchez no fueron los únicos que protagonizaron un tenso debate en el que hubo, incluso, peticiones de dimisión y de convocatoria de elecciones. Miquel Iceta y el diputado de Vox Ignacio Gil Lázaro también ofrecieron intervenciones muy vehementes.
Y es que el político de extrema derecha acusó al Ejecutivo de Sánchez de hacer "una maniobra repugnante" y de ceder ante los "golpistas que dicen que volverán a hacerlo". También aseguró que sentarían a todos los ministros "ante un tribunal" porque, a su juicio, esta medida de gracia "es ilegal", a pesar de que está recogida en la Constitución.
"Millones de españoles están hartos de tanta patraña e indignidad y están dispuestos a comprometerse con VOX, que les defenderá de un gobierno traidor, cobarde y miserable", dijo el diputado de Vox dirigiéndose hacia la bancada de Iceta.
Ante estas declaraciones, el ministro de Política Territorial y Función Pública le pidió que "retirase los descalificativos", aunque dijo saber que "no lo hará porque hay que ser muy hombre". En esta misma intervención también señaló, de manera contundente, que "no ha nacido" quien le "humille" a él ni a España.
Respecto a la cuestión de legalidad de los indultos que han venido haciendo desde el PP y la extrema derecha, recordó que "están regulados por una ley" y que el Gobierno no dará la "amnistía", pero sí apostará "por el diálogo y la política". "Con nosotros España no corre peligro", indicó a este respecto.
"Los indultos están regulados por una ley, y ustedes quieren la ley del ojo por ojo y diente por diente. Pero yo elijo el Nuevo Testamento, el del perdón, lo contrario a lo que ustedes respetan", sentenció antes de finalizar su comparecencia en el hemiciclo.
Asimismo, el dirigente socialista manifestó que en su carrera como político en Cataluña siempre ha defendido la Constitución y el marco legal, "algo que otros no han hecho".