El macrojuicio en el que están imputados exaltos cargos del PNV alavés y exmiembros del gobierno de Juan José Ibarretxe ha comenzado en la Audiencia de Álava con los 26 imputados sentados en el banquillo, entre ellos el principal procesado Alfredo de Miguel, ex número dos del PNV en esa provincia.
Junto a él están en la sala de vistas otros dos exmiembros del PNV alavés Aitor Tellería y Koldo Ochandiano; así como el que fuera viceconsejero de Cultura y Juventud del Gobierno Vasco con Juan José Ibarretxe, Gurutz Larrañaga; el expresidente de la Red de Parques Tecnológicos del País Vasco Julián Sánchez Alegría y la que fuera alcaldesa de Zambrana (Álava) por el PNV María Justina Angulo, entre otros.
Todos ellos han llegado al Palacio de Justicia de Vitoria acompañados de sus abogados, en la primera sesión de un juicio que se prevé se prolongue hasta el próximo octubre. La primera sesión y las de las dos primeras semanas de este procedimiento, que es el mayor sumario por presunta corrupción instruido en Euskadi, están reservadas a las cuestiones previas que planteen las partes.
Así, no será hasta el 19 de febrero cuando empiecen las declaraciones y todavía se desconoce si éstas arrancarán con las de los imputados, ya que los abogados de algunos de ellos van a plantear que sus interrogatorios se practiquen en último lugar. El tribunal está presidido por el magistrado Jaime Tapia y completan la terna Elena Cabero -ponente de la sentencia- y Raúl Aztiria.
La Fiscalía mantiene que De Miguel, para quien pide más de 54 años de cárcel, dirigió un entramado societario creado antes de 2005 con el que buscaba obtener un "ilícito beneficio económico destinado a su enriquecimiento personal y de terceras personas" y que para ello se valió de las responsabilidades políticas que tenía por su pertenencia al PNV.
El Ministerio Fiscal establece que la trama delictiva pivotó en torno a Kataia Consulting, una mercantil con domicilio social en una sociedad gastronómica en Vitoria desde la que supuestamente se cobraron comisiones del 4 %.
Dada la envergadura del caso se ha acordado que el juicio se divida en doce piezas o bloques temáticos que se corresponden con las distintas operaciones investigadas, entre las que figuran varias contrataciones con la consejería de Cultura del Gobierno Vasco entre 2006 y 2008, el Parque Tecnológico de Álava y la Diputación alavesa.