Ciudadanos ya ha afirmado que afronta estas elecciones catalanas, previstas de momento para el 14 de febrero, con un reto muy claro. "Que no tengamos cuatro años más de lo mismo", ha expresado Inés Arrimadas, presidenta de la formación naranja, que ha añadido: "Podemos hacer un cambio". Para llevarlo a cabo, ha tendido la mano al PSC.
"Nosotros proponemos un gobierno de Ciudadanos-PSC liderado por nosotros", ha proseguido Arrimadas, que ha propuesto un Govern de coalición "sensato y moderado", si bien las últimas encuestas no están acompañando en cifras a las pretensiones del partido: le dan la mitad de escaños que a los socialistas.
Ello no impide que Arrimadas siga asegurando hasta la fecha que "el mejor gobierno que se puede hacer después de las próximas elecciones es de Ciudadanos y de PSC" frente a un independentismo que, según ha considerado, se encuentra "desmovilizado". En esta línea, ha advertido de que "la única manera de resucitar el procés es que el Partido Socialista pueda elegir un tripartito".
Precisamente, desde el partido parecen desconfiar aún de las intenciones de los socialistas catalanes, con Salvador Illa a la cabeza, tras conocerse los resultados electorales. Al menos, es lo que plantean algunos líderes de la formación, como Carlos Carrizosa. El candidato de Ciutadans a la Presidencia de la Generalitat ha afirmado saber que "Illa prepara un tripartito en Cataluña porque ya ha pactado con Esquerra en el resto de España".
También lo cree la propia Arrimadas, que ha insistido en que "si al PSC le salen los números, hará un tripartito". Frente a este escenario, la presidenta de Ciudadanos ha reivindicado la posibilidad de un ejecutivo "libre de corrupción", "que no ceda a chantajes separatistas" y que suponga "el cambio de verdad a una nueva etapa".
Es lamentable que Illa siga tomando decisiones en función de su calculadora electoral"
Desde el Partido Popular creen que Salvador Illa ya debería haber dimitido. "Es lamentable, triste y rozando lo inmoral que, en este caso, Salvador Illa siga tomando decisiones en función, no de las necesidades sanitarias del país, sino de su calculadora electoral", ha denunciado Alejandro Fernández, candidato de los populares a liderar la Generalitat.
En contraposición, ha defendido la gestión económica que los populares han hecho en la crisis del coronavirus. "Los datos sanitarios en las comunidades donde gobierna el Partido Popular son similares a los de Cataluña. En cambio, los datos económicos son mucho mejores", ha apuntado Fernández.
"El 'efecto Illa' es más bien el 'defecto Illa'"
Por su parte, en Junts Per Catatunya han optado por seguir apostando por la confrontación con el Estado. "Evitar el conflicto con el Estado es inviable o indeseable", ha destacado Josep Costa, vicepresident primero del Parlament catalán. Así, han denunciado que hay una operación de estado para que gobierne Illa y, de esta manera, frenar el independentismo.
"Lo intentaron en diciembre de 2017 con Ciudadanos. Ahora cambian los cromos y lo intentan con el PSC, que es el PSOE. Según las evidencias, el 'efecto Illa' es más bien el 'defecto Illa'", ha criticado Laura Borrás, candidata de JxCAT al Govern catalán.
Para los próximos comicios, la Generalitat ha asegurado que se mantendrán todos los protocolos de seguridad y ha propuesto que se hagan pruebas de antígenos a todos los miembros de las mesas electorales. De acuerdo con el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), el PSC se sitúa al alza en las elecciones del 14-F con entre 30 y 35 diputados, por lo que se disputaría la victoria con ERC (31-33), seguido de JxCat (20-27) y Cs (13-15).