La Organización Mundial de la Salud está preocupada por el aumento de casos de COVID-19 en España. En este sentido, según la entidad, se necesitará un "esfuerzo sostenido" para bajar las cifras.
Ahora bien, la organización considera que este amplio aumento de los contagios no tiene por qué corresponder a la expansión de las nuevas cepas del virus, como la británica o la sudafricana: "No necesariamente parece que sea un factor que haya impulsado el aumento", ha expresado este jueves Catherine Smallwood, responsable de Emergencias de la OMS.
En cambio, Smallwood achaca los nuevos registros a las celebraciones navideñas y a todas aquellas reuniones posteriores al período vacacional: "Requerirá un esfuerzo sostenido bajar las cifras, lleva mucho tiempo bajar esos números, pero en los últimos dos días hemos visto una estabilización de los nuevos casos y esperamos que eso se traduzca en una caída gradual en las próximas semanas", indica la experta.
Además de esta conclusión, la OMS ha remarcado la gravedad de la situación en España. Frente a las "tendencias realmente positivas en más de la mitad de los países europeos", en territorios como nuestro país o Portugal la subida ha sido "significativa", afirma Smallwood.
"En España vemos un alto número de casos, casi 200.000 la última semana, y eso es algo sobre lo que hay que estar particularmente preocupado. Hay amplia transmisión en todo el país, especialmente en las grandes ciudades y presión sobre los hospitales", indica la entidad.
Junto con eso, durante la comparecencia, como recoge la Agencia EFE, el director regional de la OMS, Hans Kluge, ha alertado contra el levantamiento prematuro de las restricciones en Europa, debido a que la transmisión se mantiene en niveles altos y por el riesgo de las nuevas mutaciones. "No nos olvidemos de las lecciones que hemos aprendido de forma tan cruda: abrir y cerrar rápidamente es una estrategia pobre", concluye desde la sede regional de la OMS en Copenhague.