Isabel Díaz Ayuso no va a celebrar finalmente una cena de Navidad con los compañeros del PP madrileño. La presidenta de la Comunidad de Madrid lo ha confirmado este martes usando para ello un conocido refrán español con un mensaje claro: "Donde manda patrón no manda marinero". En este caso, la marinera sería ella y el patrón Pío García Escudero, actual presidente del Partido Popular de Madrid, sección de la formación que Ayuso aspira a dirigir tras la celebración del Congreso del partido.
La dirigente madrileña se pliega así a las órdenes dictadas por García Escudero y no habrá así cena del grupo parlamentario de la Asamblea de Madrid del PP este próximo jueves, 16 de diciembre, tal y como estaba previsto hasta ahora. Fuentes populares en la Asamblea han explicado a laSexta que ya se ha cancelado la reserva en el establecimiento donde iba a producirse la cena navideña entre los miembros de la formación.
No obstante, Díaz Ayuso también ha querido manifestar su posición disconforme con la decisión del líder del PP madrileño, asegurando que cancelar dicho encuentro contradice las normas sanitarias impuestas por su Gobierno que tan buenos resultados han cosechado, según ella, en todo el territorio autonómico: "No puedo celebrar la cena porque está prohibida. Soy una afiliada de base más, disciplinada, que siempre cumple con las normas".
"Esto va en la dirección contraria a la política sanitaria que hemos defendido en la Comunidad de Madrid, que es todo un éxito", ha puesto en valor Ayuso, que ha añadido: "Aquí sabemos lo que hacemos. No es la política de la cancelación la que hemos defendido. Jamás ha sido así, y no hay motivo para que se cancelen las cosas ni se prohíban". Tan solo un día antes, García Escudero se mostraba tajante a través de un comunicado: "Desde hoy, quedan suspendidos todos los actos navideños del partido en la Comunidad".
Y una vez más, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha tenido que mediar entre los evidentes tiras y aflojas que mantiene Ayuso con la dirección del partido en Madrid y a nivel nacional: "Que la presidenta entienda que las cenas se pueden celebrar, así como que se haya tomado la posición del partido de que, por una cuestión de prudencia y dada la situación en la que nos encontramos, no se celebren las cenas del partido. No tiene más debate. No es un ataque a la estrategia sanitaria de la Comunidad de Madrid".
Aunque parece que lo es. Porque mucho más duro se ha mostrado el presidente del PP, Pablo Casado, que sin entrar mucho en la polémica ha recordado a la dirigente madrileña que está muriendo gente a causa de la pandemia de coronavirus: "No estoy en esas cosas. Lo que puedo decir es que ayer murieron 100 personas por COVID. Es una dramática realidad que a veces conviene recordar".