El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ha sido imputado esta semana por el Tribunal Supremo por presunta revelación de secretos en relación con la investigación contra el novio de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador, acusado de fraude fiscal y falsedad documental. Se trata de un hecho inédito por el que el fiscal ha rechazado dimitir, mientras el Gobierno ha hecho una defensa cerrada de su actuación. Un barómetro de laSexta pregunta a los españoles sobre la decisión que debería tomar García Ortiz en una encuesta.
Según los datos de la encuesta del Instituto InvyMark realizada el 14 de octubre para laSexta, el 51,3% de los encuestados creen que el fiscal general del Estado debe dimitir tras ser imputado por el Alto Tribunal por revelación de secretos. Un porcentaje ligeramente superior al de los encuestados que piensan que García Ortiz debe permanecer en su cargo (47,9%).
En este barómetro realizado con una base de 1.200 personas, las opiniones son dispares según las preferencias políticas ya que solo un 4,2% de los votantes del PSOE pide la dimisión frente a un 95,3%. Ocurre lo contrario entre los votantes del Partido Popular: el 97,5% considera que García Ortiz tiene que renunciar a su cargo frente al 2,1%.
El comportamiento se repite entre los votantes de Vox y Sumar, partidos en los que se aboga mayoritariamente por que el fiscal deje el cargo y mantenerse en él, respectivamente. Mientras, por sexo y edad, la diferencia de porcentajes a favor de su renuncia y en contra son parecidas.
El debate sobre la dimisión o no del fiscal general del Estado se produjo por su imputación tras una querella del novio de Ayuso. Ahora mismo García Ortiz cuenta con el total respaldo del Gobierno, mientras el Consejo y la Junta Fiscal tienen diferentes opiniones sobre si el fiscal debería dimitir o no. Tras varias reuniones, finalmente la cúpula fiscal respaldó a García Ortiz y los representantes de la carrera pidieron su dimisión.
Desde el Ejecutivo y pese a la presión de la oposición, "se han manifestado desde el primer momento de manera clara y rotunda: respetan la posición del Tribunal Supremo, pero respaldan la acción del fiscal general del Estado porque ha hecho su trabajo, lo que debía hacer". Así lo ha señalado el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien ha pedido la dimisión de Ayuso.