La investigación del juez Juan Carlos Peinado contra Begoña Gómez ha ido mutando hasta centrarse en su actividad profesional en la Universidad Complutense de Madrid. Esta solicitó el 1 de julio personarse en la causa si se detectara que existió algún daño patrimonial para la institución, con un informe en el que reconocía no haber alcanzado "una conclusión definitiva" al respecto y reprochaba en este sentido "la falta de colaboración de determinados intervinientes", sin precisar de quién.

Sin embargo, lo cierto es que Begoña Gómez ofreció a la Complutense la documentación sobre su cátedra, pero la propia Universidad no quiso recogerla por "prudencia" al estar abierto un procedimiento judicial. Así lo refleja el acta de la comisión mixta de seguimiento de la cátedra de Transformación Social Competitiva que Gómez codirige en la UCM, a la que ha tenido acceso laSexta.

Ese documento da cuenta de la reunión de la comisión de seguimiento celebrada el pasado 2 de julio, a la que Begoña Gómez llevó la memoria de actividades y la memoria económica de su cátedra correspondientes a 2023. Sin embargo, la comisión rechazó aprobarlas, esgrimiendo su presidente, el vicerrector José María Coello de Portugal, que debían "ser prudentes no aprobando lo que está siendo objeto de diligencias judiciales".

La UCM envía el informe sin esperar a la reunión

Además, la Universidad Complutense envió al juez el informe en el que reprochaba esa supuesta "falta de colaboración" un día antes de citar a Gómez para entregar la documentación. En él se recoge que la esposa del presidente del Gobierno no acudió a la reunión de la comisión de seguimiento convocada para el día 24 de junio "por motivos personales" -por esas fechas falleció su padre-, pero lo envió el 1 de julio, sin esperar a la reunión a la que sí acudió tan solo un día después.

El actual vicerrector y su predecesor han acudido justo este viernes a los Juzgados de Plaza de Castilla para declarar como testigos, después de que lo haya hecho la propia Begoña Gómez, que se ha acogido a su derecho a no declarar ante el juez Juan Carlos Peinado, que la investiga por presunto tráfico de influencias y corrupción en los negocios.

Según fuentes de la defensa de Begoña Gómez, Coello de Portugal ha dicho en su declaración que no recogieron la documentación de Begoña Gómez porque consideraron que no era prudente, pero no se le ha preguntado por qué mandaron el informe el 1 de julio cuando ella compareció el día 2.

El abogado de Gómez habla de "estrategia"

Al asunto de la Complutense se ha referido precisamente el abogado de Gómez, Antonio Camacho, este viernes en Al Rojo Vivo, donde ha incidido en la contradicción que supone que la Universidad hablara de "falta de colaboración" en su informe y luego rechazara recoger la documentación que quería aportar su defendida.

"A mi representada se le pidió documentación, mandó un correo electrónico diciendo que la estaba recopilando y al día siguiente de que fuera presentado ese informe compareció en una comisión de seguimiento de la cátedra. Ahí llevaba toda la documentación y fue la propia universidad la que se negó a recoger esa documentación sobre la base de que existía un procedimiento judicial", ha precisado el letrado.

"No tiene lógica que el día 1 [de julio] la Universidad Complutense se queje de falta de colaboración y el día 2 se niegue a recoger la documentación que le está entregando", ha reprochado el letrado, que además ha destacado que "cuando ella comparece con esa documentación" en la citada reunión, desde la Complutense "no se le dice en ningún momento que existe ese informe".

"Parece que todo forma parte de una estrategia que este letrado duda que tenga por objeto llegar a la verdad de los hechos", ha deslizado, insistiendo en que "no es posible que la Universidad Complutense el día 1 se queje de falta de colaboración y el día 2 no recoja la documentación que llevaba en mano" Begoña Gómez.

La defensa achaca "inexactitudes" al informe de la UCM

El abogado asimismo ha denunciado que ese informe de la Complutense incurre en "inexactitudes" y "contradicciones importantes", también al manifestar que la Universidad no tenía conocimiento del registro de la plataforma desarrollada por varias empresas para la cátedra de Begoña Gómez, cuando su representada "tiene correos desde la Universidad Complutense explicándole cómo hay que hacerlo y que la oficina que depende de la Universidad Complutense no lo había hecho nunca".