El fin de una era

Cambios en Cuelgamuros: la salida del abad que frenó la exhumación de Franco allana la resignificación del Valle

¿Quién es? Santiago Cantera, abad de la abadía de Cuelgamuros y figura clave en la oposición a la exhumación de Franco, abandona su cargo tras un largo enfrentamiento con el Gobierno, su salida facilita el avance de la Ley de Memoria Democrática.

Cambios en Cuelgamuros: la salida del abad que frenó la exhumación de Franco allana la resignificación del Valle

El Gobierno ha cesado a Santiago Cantera, hasta ahora abad de la abadía de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, en un movimiento que busca acelerar la resignificación del complejo de Cuelgamuros. Cantera, quien se opuso firmemente a la exhumación de Francisco Franco en 2019, deja su cargo tras años de tensión entre la Iglesia y el Ejecutivo.

En 2019, el nombre de Santiago Cantera cobró notoriedad cuando se convirtió en el principal obstáculo para la exhumación de Franco. Como prior de la abadía, rechazó de plano la orden gubernamental alegando que el traslado de los restos del dictador afectaba a la inviolabilidad del templo. Su oposición no quedó en meras declaraciones: presentó recursos legales para dilatar el proceso, aunque sin éxito. Finalmente, la exhumación se llevó a cabo el 24 de octubre de 2019.

Antes de ingresar en la vida monástica, Cantera tenía otras aspiraciones. En su juventud, se presentó como candidato en las listas del partido falangista, una faceta de su pasado que resuena en su postura sobre la memoria histórica. Su liderazgo en la abadía de Cuelgamuros ha terminado, pero no por decisión propia, sino por un cese impulsado en el marco de las negociaciones entre el Gobierno, el Vaticano y el arzobispado.

El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha sido claro al respecto: "Trasladamos la necesidad de que un prior nostálgico del franquismo saliera". El cese de Cantera responde a la aplicación de la Ley de Memoria Democrática, que establece la resignificación del Valle de Cuelgamuros, un objetivo que chocaba frontalmente con la visión del abad.

Para la Iglesia, ciertos aspectos del proceso de resignificación han sido motivo de fricción con el Gobierno. Jesús Bastante, redactor jefe de 'Religión Digital', señala que "Santiago Cantera suponía un tapón para que se cumpliera la Ley de Memoria Democrática sin que se tocaran determinados aspectos que para la Iglesia son líneas rojas", como el estatus de la abadía como lugar de culto o la permanencia de la cruz monumental.