Los datos que vamos conociendo este sábado de algunas comunidades reflejan que, en la mayoría, bajan los contagios. Sin embargo, suben de forma preocupante en algunas; por ejemplo, en Murcia, donde se han duplicado en una semana. Las fiestas multitudinarias y otras situaciones de aglomeraciones ya no se podrán llevar a cabo este fin de semana en la Región. Este territorio ha sido el primero en aplicar lo que ya se conoce como 'toque de queda encubierto'.
Así, en Murcia quedan prohibidas las reuniones de no convivientes durante la madrugada y está prohibido vender alcohol desde las 22:00 horas. Junto a Melilla, es el único punto del país donde han subido los contagios (629, un aumento del 46%). En el resto de comunidades, como se ha indicado antes, con Euskadi a la cabeza, ha bajado el número de contagios diarios con respecto al fin de semana anterior.
La realidad, viendo los datos, es que el efecto de las restricciones se empieza a notar en algunas Comunidades. Para ello, ponemos ejemplos: Asturias, que está pendiente de la autorización de la Justicia para aplicar el toque de queda, cerró el ocio nocturno a mediados de mes. Desde entonces, su curva de positivos se ha estabilizado y comenzado a descender en su incidencia (560 casos por cada 100.000 habitantes).
Lo mismo ha sucedido en Cantabria (686 de IA), donde la Justicia ha tumbado el cierre del interior de los negocios de hostelería y el pasaporte COVID para poder acceder a ellos. Otro ejemplo es Cataluña. En esta comunidad, una semana después de aplicar el toque de queda, la cifras de afectación empezaron a bajar. Y así, este sábado, con 300 puntos menos (926 de incidencia acumulada), deja de estar a la cabeza del país.
No obstante, si hablamos de incidencia, aunque mejora en general, sigue estando disparada. Salvo en Melilla, todas están en riesgo extremo, con Baleares a la cabeza (951 casos por cada 100.000 habitantes), seguida de Cataluña (926) y de Navarra (877). En este punto, hay que prestar especial atención a la situación en las residencias: la última semana se ha llegado a superar el millar de contagios, una cifra que no se veía desde el mes de febrero.
Sin embargo, por aquel momento España registraba 600 muertes (hablamos del 1 de febrero de 2021) y a día de hoy, 37. La razón: una campaña de vacunación masiva que ha colocado a España a la cabeza en el proceso de inmunización colectiva, que sigue avanzando y que este fin de semana superará los 27 millones de personas con pauta completa en nuestro país. En Euskadi esperan adelantar a las embarazadas tras la muerte de dos fetos.