Canarias está saturada y al límite. Desde el gobierno canario denuncian que están teniendo muchas dificultades para atender a todos los menores migrantes que llegan a las islas. La saturación de estos centros ha provocado que tengan que instalar carpas en zonas como Lanzarote aunque insisten en que necesitan medidas de extrema urgencia.
Para hacer frente a este problema, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitará Mauritania el 27 de agosto. Lo hará siete meses después de su última visita al país, donde anunció que España movilizaría 300 millones de euros en inversiones en el país para frenar el repunte de la inmigración irregular. En ese viaje, Sánchez también visitará Gambia y Senegal para abordar con ellos la cuestión migratoria.
Es esa presión migratoria precisamente la que ha llevado a Canarias al borde del colapso. Según el ministerio de Interior, en lo que llevamos de 2024 han llegado a España 31.000 migrantes irregulares, es decir, un 66% más que el año pasado. De los que 22.000, 7 de cada 10, lo hicieron al archipiélago, más del doble que el año pasado a estas alturas.
Una situación insostenible que ha provocado que el Gobierno canario tome medidas. Así, piden que se habiliten más centros de acogida. Y es que de las 1.200 personas que han llegado en agosto a las costas canarias, 200 son menores.
Ahora mismo los 80 'macrocentros' que hay en las islas acogen a 5.200 menores no acompañados. La saturación de estos centros ha provocado que se habiliten carpas temporales. De momento una en el puerto de Lanzarote y el cabildo se plantea la instalación de otra en El Hierro, donde han llegado 500 migrantes en los últimos cinco días.