Un fuerte dispositivo policial integrado por docenas de furgonetas de los antidisturbios de los Mossos y Policía Nacional ha logrado desalojar a los manifestantes independentistas de la autopista AP7, a su paso por Girona, aunque éstos se han desplazado y replegado en el municipio vecino de Salt.
Tras más de doce horas de corte de la autopista, la policía ha desalojado a los manifestantes, lo que ha permitido iniciar los trabajos de limpieza y habilitación de la vía, donde se habían montado barricadas y hogueras. Además, diversos vehículos atrapados en el corte tienen ruedas pinchadas y daños que suman más dificultad al restablecimiento de la circulación, según han informado los Mossos d'Esquadra.
Los agentes han empezado a avanzar por la autopista haciendo retroceder a los manifestantes, algunos de los cuales les han lanzado piedras y otros objetos, sin que los agentes hayan llegado a cargar contra ellos. En la huida, un numeroso grupo de personas que participaban en la protesta se han dirigido a la calle principal del municipio de Salt, donde han levantado una barricada.
Los Mossos d'Esquadra se han parapetado ante estos manifestantes y lanzan proyectiles de 'foam' para dispersar a los concentrados. Numerosos vecinos asisten desde balcones y bares al despliegue policial, después de una noche en la que centenares de vehículos se han visto atrapados por el corte de la autopista.
La megafonía de las furgonetas de Mossos d'Esquadra advierte a los concentrados de que se dispersen ante la inminente actuación de los antidisturbios en la zona.