El cambio político en Cataluña ya es una realidad. Salvador Illa ya tiene formado su Govern que estará monopolizado por el PSC, aunque contará con perfiles técnicos y especializados para determinadas áreas de responsabilidad y varios puestos que ocuparán el nacionalismo moderado. Y es que el president ya ha dejado entrever con sus primeros pasos que la política "unir y servir" será la tónica general que implantará durante su mandato al frente de Cataluña.

Un Govern que pretende integrar a "todos los catalanes", otorgando un espacio al nacionalismo que se ha visto relegado a un segundo plano con la irrupción del socialismo en Cataluña. Por ello, el núcleo del PSC ha nombrado como nuevo conseller de Empresa y Trabajo a Miquel Sàmper, que ya fue conseller de Interior en la etapa de Quim Torra y que se desvinculó de Junts el pasado febrero.

Aunque no es el único que entra dentro de este núcleo de nacionalistas moderados del futuro ejecutivo de Illa. A Miquel Sàmper se une Ramon Espadaler, un exdirigente de CiU que lleva varios años colaborando activamente con el PSC, el cual ha sido nombrado como consejero de Justicia.

Una lista que el PSC ha ampliado este domingo con nuevas incorporaciones. Tal y como ha podido confirmar laSexta, Illa ha escogido a Mónica Martínez Bravo como consellera de Derechos Sociales e Inclusión. Una figura reconocida por sus trabajos en el Ministerio de Elma Sanz sobre igualdad de oportunidades, como su proyecto para mejorar el diseño y gestión del Ingreso Mínimo Vital, y que dejará su actual puesto para poner rumbo al nuevo Govern socialista.

Para cerrar los anuncios de este domingo se unen Eva Menor como consellera de Igualtat i Feminisme, Óscar Ordeig Molist como conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Olga Pané como consellera de Salud, Esther Niubó como consellera de Educación, Silvia Paneque como consellera Territorio, Vivienda y Transición Ecológica y portavoz del Gobern, Berni Álvarez como conseller de Deportes, Francesc Xavier Vila como conseller de Política Lingüística, Sonia Hernández, diputada de ERC y directora general de Patrimonio Cultural durante el mandato de Pere Aragonèz, como consellera de Cultura , Jaume Duch como conseller de Unión Europea y Acción Exterior y Núria Montserrat como consellera de Universidades e Investigación. Nombramientos que se suman a la restitución de Josep Lluís Trapero como director general de los Mossos d’Esquadra ya anunciada por Illa.

En cuanto al puesto que deja vacante Illa como presidente del PSC en el Parlament, el diputado socialista Ferran Pedret sustituirá al recién elegido president de la Generalitat. Pedret fue el encargado de hacer la intervención del PSC en el debate de investidura de Illa de este jueves y, dentro del partido, ocupa la secretaría del Área de Mejora del Autogobierno y Acción federal de los socialistas catalanes.

Incorporaciones que se suman a Romero, Parlon y Dalmau

Tal y como ha podido confirmar laSexta, Alícia Romero, número dos de Illa durante la campaña electoral del 12-M, ha sido el primer nombre que se ha puesto encima de la mesa. La que hasta ahora era portavoz del PSC en el Parlament de Cataluña será la nueva consellera de Economía y Hacienda del Govern. Romero ha sido la encargada de negociar los últimos proyectos presupuestarios del Govern por parte del PSC y es una de las voces autorizadas de los socialistas en cuestiones económicas. Además, fue presentada durante la campaña electoral como la número 'dos' de Illa, por lo que era de esperar que obtuviera un cargo de relevancia.

Aunque no ha sido la única que ya estaba dentro del Govern de Salvador Illa desde este sábado. La alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) y portavoz del PSC, Núria Parlon, será la titular de Interior. Un puesto que era de esperar, ya que el propio líder del PSC había prometido antes de los comicios autonómicos que la alcaldesa formaría parte de sus consellers si era nombrado president.

Por su parte, el actual gerente del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Dalmau, será el conseller de Presidencia. Un hombre de confianza del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y que ha sido el gerente más joven de la historia de la ciudad, cargo que ha ejercido durante poco más de un año.

Un gobierno "para todos los catalanes"

"Unir y servir". Una política clara que Salvador Illa ha querido recalcar desde el minuto uno de su mandato. Nada más ser nombrado president de Cataluña se comprometió a "unir y servir" a través de un Gobierno que "será para todos y todas las catalanas" con el objetivo de llevar "la máxima libertad, la máxima prosperidad y la máxima igualdad posible a los catalanes".

No solo insistió en la idea de unir y servir, sino que enfatizó que su principal objetivo es "gobernar tan bien como sepa para todo el mundo" porque la Generalitat es "de todos los catalanes". "Que todo el mundo se sienta representado es mi principal inquietud. En esto, doy continuidad a un rasgo característico de la presidencia de Pere Aragonès, a quien quiero agradecer en este acto solemne un traspaso de responsabilidades ejemplar, por exhaustivo y respetuoso", señaló.

Una política que tampoco se olvida ni del lenguaje ni de la identidad de Cataluña, recalcando que el fin último es convivir y no atacar o ir en contra de nadie: "Cataluña es solidaria, nuestra voluntad de ser es también una voluntad de convivir y la defensa de nuestra lengua, nuestra cultura y nuestra tierra no es nunca contra nadie ni para perjudicar a nadie".