El Parlament de Catalunya ha aprobado este viernes los primeros Presupuestos de la Generalitat desde 2017, gracias al aval de Junts per Catalunya, Esquerra Repubicana y Catalunya en Comú Podem. Unas cuentas que nacen desfasadas por la crisis del coronavirus, por lo que ahora habrá que realizar ajustes para adaptarlas a la situación, según admiten desde el Govern.
Pasadas las 22:00 horas y en un pleno en el que solo han votado presencialmente 16 diputados -93 lo han hecho por delegación y otros 25 por vía telemática-, el Parlament ha aprobado el proyecto que el Govern acordó con los comunes.
En concreto, la cámara ha aprobado los Presupuestos de 2020 con los votos a favor de JxCat y ERC, la abstención de los comuns y la oposición del resto de grupos, tres años después de la aprobación de las últimas cuentas catalanas, que se han ido prorrogando desde entonces, y sin incluir en ellas la crisis sanitaria.
El vicepresident del Govern, Pere Aragonès, ha reconocido que cuando se empezó a elaborar el proyecto, "hace seis meses", no había ninguna alarma por el COVID-19 y, por lo tanto, ahora habrá que "reorientar" las cuentas para adaptarlas a las necesidades generadas por la crisis sanitaria. Cuentas que, en cualquier caso, ha mantenido, son "mejores" que el presupuesto prorrogado de 2017, año del referéndum del 1-O.
Los Presupuestos se han aprobado un mes más tarde de lo previsto, ya que Ciudadanos decidió llevar el proyecto al Consell de Garanties Estatutàries (CGE) al considerar que las previsiones económicas no se cumplirían tras la pandemia, pero el CGE avaló los Presupuestos, rechazando los argumentos del partido naranja.
El proyecto, que prevé un aumento del gasto no financiero y no finalista en 3.070 millones de euros respecto a las cuentas prorrogadas (12,6%), ha llegado al pleno con unas 1.900 enmiendas: más de la mitad de Cs (1.266), 354 del PSC-Units, 173 del PP, 98 de la CUP y 7 de los comuns.