Brahim Ghali, el líder del Frente Polisario, movimiento que defiende la autodeterminación del pueblo saharaui ante el Estado de Marruecos, tiene abiertas dos causas judiciales en España.
El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, que instruye ambos casos, ya le ha enviado una de las citaciones para declarar, pero el líder se ha negado a firmarla. Ghali está ingresado en el Hospital de Logroño —bajo un nombre falso— desde el pasado mes de abril, debido a que el Gobierno español accedió a asistirle después de que contrajera el coronavirus y presentara un estado grave. "Un acto humanitario", de acuerdo con la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, que ha terminado desembocando en una crisis diplomática sin precedentes.
En las últimas horas, tanto la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos como querellante en una de las causas, como la defensa de Fadel Breicaha, la otra acusacion, han vuelto a pedir al juez el inmediato ingreso en prisión del Ghali. Lo justifican ante la posibilidad del riesgo de fuga, de que destruya pruebas o de que se registre reiteración delictiva. Este jueves, el juez ha rechazado la solicitud.
¿De qué se acusa exactamente a Brahim Ghali? ¿Por qué el líder del Frente Polisario tendrá que lidiar con la Justicia española? Según los autos del caso, la primera causa es por "delitos de detención ilegal, torturas y delitos de lesa humanidad", mientras la segunda, que en un principio fue archivada (en octubre del año pasado), ayer mismo fue reabierta. En ella, se tratan presuntos delitos de "genocidio, en concurso con asesinato, lesiones, detención ilegal, terrorismo, torturas y desapariciones" contra diversas personas.
Denuncias de activistas saharauis
La primera causa encuentra su origen en una denuncia particular, formulada por Fabel Breica, un activista saharaui de nacionalidad española crítico con la postura del Frente Polisario, que acusa al líder de detención ilegal y torturas.
En una de sus estancias en los campamentos de Tinduf (Argelia), en 2019, Breica fue detenido y enviado a un centro de localización indeterminada donde, asegura, le torturaron con golpes, descargas eléctricas y ataduras en pies y manos. Se le instó a abandonar la zona y le tacharon de traidor. Y es por estos hechos por los que está citado a declarar el 1 de junio.
Ahora, el magistrado está a la espera de una nueva respuesta de Ghali, cuya citación también está prevista para el 1 de junio. No obstante, esto podría cambiar en los próximos días, ya que el magistrado Pedraz está esperando a ver cómo evoluciona su estado de salud. En el caso extremo de que el líder se niegue a asistir a la declaración, se podría dictar una orden de detención contra él para ponerlo a disposición judicial.
La segunda causa, recién reabierta, proviene de una querella, en este caso, de la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos que hoy ha pedido al juez su inmediato ingreso en prisión. Tal y como confirman fuentes jurídicas a laSexta, Pedraz no solo tenía previsto citar a Ghali como testigo, sino también como investigado. Sin embargo, para este último movimiento todavía no hay fecha, todo ello mientras se mantiene la incógnita de cuándo saldrá el líder del hospital y qué hará llegado ese 1 de junio.